Sin aire acondicionado en la sede de la Generalitat Valenciana en Alicante

En medio de las olas de calor que azotan a la ciudad, la sede del gobierno autonómico tiene el aire acondicionado estropeado, ya que funciona sólo uno de los tres aparatos instalados. Una situación que desde la Confederación Sindical de Comisiones Obreras (CC OO) han calificado como «muy grave» para la salud tanto de los trabajadores como de los usuarios de este servicio público.

Además, la avería no ha sido una sorpresa para los trabajadores del edificio, ya que también dejó de funcionar el pasado año 2022 y es «un tema repetitivo». Pero, según las diferentes consellerias de GVA que se encargan del mantenimiento del Prop, solucionar el problema de climatización tendría un coste «de un millón de euros» entre estudios técnicos y ejecución.

Así lo ha explicado a este diario el delegado de Prevención de CC OO y presidente del Comité de Seguridad y Salud de los Servicios Territoriales de la Vicepresidencia y Conselleria de Igualdad y Políticas Inclusivas (Vicipi), Jerónimo Martínez.

El Comité de Seguridad y Salud de los Servicios Territoriales de la Vicipi solicitó una medición real a través del Instituto Valenciano de Seguridad y Salud en el Trabajo (Invassat) y, de acuerdo con el presidente del Comité de Seguridad y Salud de la Vicipi, «el informe de evaluación de condiciones ambientales es demoledor».

Los resultados han reflejado que, en varias partes del edificio, los ciudadanos son atendidos a una temperatura de 29,5º. Casi tres grados por encima del máximo que establece el Real Decreto 486/1997, de 14 de abril, del Boletín Oficial del Estado (BOE), para los trabajos sedentarios que se realizan en oficinas. Y la medición de Invassat, según Jerónimo Martínez, «no se realizó en uno de los días más calurosos», por lo que se podrían sobrepasar los 30º en las instalaciones durante otras jornadas.

El Instituto Nacional de Seguridad e Higiene en el Trabajo (Insht) indica en su Nota Técnica de Prevención (NTP) 322 que la existencia de calor en el ambiente laboral constituye frecuentemente «una fuente de problemas», como quejas por falta de confort, el bajo rendimiento en el trabajo y, en ocasiones, riesgos para la salud.

Y todos ellos ya han tenido lugar en el Prop, ya que las altas temperaturas durante ocho horas diarias por la falta de aire acondicionado generan «estrés térmico», lo que se traduce en una «atención incorrecta», tal como ha indicado presidente del Comité de Seguridad y Salud. Además, se han producido «mareos» y otros síntomas físicos, especialmente entre personas con enfermedades y/o que precisan medicación.

Y aunque garantizar el correcto funcionamiento del aire acondicionado es competencia de la Conselleria de Sanidad, desde CCOO no se vislumbra una solución a corto plazo. Según ha informado el delegado de Prevención, dicha administración «no tiene directora territorial» y todavía no hay una respuesta firme.

Por el momento, la Conselleria de Bienestar Social ha comprado 40 ventiladores «para ponerle a cada persona trabajadora y al ciudadano que se sienta en la mesa», según Jerónimo Martínez. No obstante, el movimiento del aire no soluciona el problema del calor ya que «la temperatura no baja», tal como ha añadido el presidente del Comité de Seguridad y Salud de los Servicios Territoriales de la Vicipi.

A este respecto, Martínez ha espetado que desde el comité quieren que las administraciones competentes brinden «soluciones inmediatas y que perduren en el tiempo». Especialmente en la ciudad alicantina, donde se experimentan veranos especialmente calurosos. «No podemos dar la espalda al cambio climático, y menos en zonas tan sensibles como es Alicante», ha clamado el presidente del comité.