Alicante se queda sin moscatel por la sequía

La variedad moscatel es una uva de altísimo valor económico, muy demandada por los mejores y más selectos mercados nacionales e internacionales tanto para mesa como para producir los tan apreciados vinos dulces típicos de la provincia de Alicante. La parte norte de la provincia es lugar idóneo para el cultivo de esta variedad de uva por ser la más húmeda. Sin embargo, los cultivos este año se han echado a perder.

En el Vall de Pop, sobre todo en los municipios de Xaló y Llíber, la Cooperativa Valenciana Virgen Pobre de Xaló sufrirá una pérdida de producción de 2 millones de kilos de las variedades de uva moscatel y giró para vinificación de las 400 hectáreas con las que cuenta dicha cooperativa. Los animales silvestres actúan de forma voraz ante la acuciada sequía que atraviesa el campo alicantino, ya que no encuentran alimentos en la parte alta de la montaña, que está seca.

Los daños también han sido muy cuantiosos para la uva de mesa moscatel de secano de la Marina Alta, en municipios como Benissa. Una uva en fresco destinada a los paladares más exigentes de Barcelona, Madrid Bilbao o San Sebastián, muy valorada por los mercados 'gourmets' por su peculiar dulzor. La población de Teulada, debido a su clima cálido, su proximidad a la bahía de Moraira y el influjo del viento del llebeig, es uno de esos lugares donde la moscatel en fresco puede expresarse en su máximo esplendor. En esta zona se ha producido un destrío que equivale a 1,2 millones de kilos por las mismas causas que en Vall de Pop.

En total, la merma de producción respecto a una campaña normal oscilará en torno al 85% en el conjunto de la zona productora, «una cifra alarmante y muy elevada que los agricultores de secano de la provincia de Alicante no pueden soportar», si a la postre sumamos las pérdidas de otros cultivos muy golpeados como el cereal o la cereza.

Ante la gravedad de la situación, Asaja-Alicante reclama a la Conselleria de Agricultura, Ganadería y Pesca que actúe con contundencia a través de la puesta en marcha de ayudas directas a los agricultores afectados. «No podemos permitirnos que un cultivo tan valorado, con un arraigo histórico inmenso y ampliamente valorado en los mejores mercados se muera por la inacción de la Administración», ha manifiestado el presidente de Asaja, José Vicente Andreu.

«Estamos ante unas pérdidas más que significativas que no se pueden pasar por alto». Y es que la variedad Moscatel crea un paisaje y una cultura muy personal en La Marina Alta e imprime un sello inconfundible para la provincia de Alicante, siendo incluso emblema de nuestro país y del Mediterráneo.