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El colectivo médico no descarta convocar una huelga general con tal de mostrar su descontento con el Anteproyecto de Estatuto Marco en que está trabajando el Ministerio de Sanidad, y que entre otras cosas, prevé limitar la compatibilidad de los facultativos entre el ejercicio de la función pública y la privada.
Así lo anuncian en un comunicado conjunto el Colegio de Médicos de Alicante y el Sindicato Médico CESM-CV, que consideran que la propuesta ministerial «discrimina y menosprecia» a los médicos. La advertencia ha quedado patente en el transcurso de una reunión informativa convocada por ambas entidades este lunes en Alicante, y en la que han participado 700 asistentes.
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En la reunión se han acordado las medidas sindicales para movilizar a la profesión contra este borrador, y en las que se baraja la posibilidad de convocar un paro general a través de la Confederación Española de Sindicatos Médicos.
Está previsto que sindicatos y el Ministerio de Sanidad vuelvan a sentarse la segunda quincena del mes de febrero para acercar posturas. En un primer encuentro, el Ministerio ha presentado un segundo borrador del Anteproyecto «que recoge algunas mejoras planteadas, pero desde luego, no las suficientes», explican en el comunicado.
El presidente del COMA, el Dr. Hermann Schwarz, considera que «las condiciones laborales previstas por el Anteproyecto son discriminatorias y perjudican a los facultativos frente a otros colectivos sanitarios». Por su parte, el secretario general de la Confederación Española de Sindicatos Médicos, el Dr. Víctor Pedrera, explica que «ahora más que nunca» se debe exigir un estatuto propio del médico, «y no porque seamos especiales, sino porque tenemos unas condiciones laborales especiales».
Dr. Víctor Pedrera
Secretario general de la Confederación Española de Sindicatos Médicos
Entre ellas, este Anteproyecto incluye «como medida graciable, la limitación de la jornada semanal del médico a 48 horas», en un contexto en el que se aboga porque todos los trabajadores tengan como máximo 37.5 horas, «vulnerando para los médicos el cumplimiento de la legislación europea respecto a jornada y salud laboral».
Además, el borrador pretende englobar en el mismo grupo profesional al médico, con una formación de 360 créditos y nivel MECES III y «con mayor responsabilidad y cualificación» en el proceso asistencial, con otras categorías a las que se les exige una formación de 240 créditos (nivel MECES II), tal y como se explica en el comunicado conjunto.
Por lo que respecta al sistema de incompatibilidades de la propuesta, consideran que es todavía «más rígido» que el actual para Jefes de Servicio y Sección respecto a la sanidad privada, y también para adjuntos en los primeros cinco años de trabajo en el sistema público respecto a la actividad privada.
Creen que esta situación «se traducirá en la pérdida inevitable del talento para la Sanidad Pública, además de ser discriminatorio e injusto, se traducirá en una invitación a las nuevas generaciones de médicos a decantarse por el ejercicio privado».
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