El exconcejal de Infraestructuras de Orihuela continuará en la Junta de Gobierno

Los grupos de la oposición, sin embargo, no se han hecho esperar y ya califican esta destitución a medias. «Es una nueva tomadura de pelo», tachan desde el PP. Para los populares, esta medida obedece a un simple intento de hacer «un apaño estético, que realmente se convierte en una auténtica chapuza, máxime si tenemos en cuenta que el edil seguirá cobrando un sueldo público, y no pequeño, pese a no tener funciones que realizar».

Tampoco han ahorrado calificativos desde Cambiemos que, pese a apoyar la moción de censura que llevó a PSOE y Ciudadanos al gobierno, se ha mostrado siempre muy crítico contra la gestión de estos últimos. «Es evidente que en estos momentos el señor Noguera sigue siendo miembro de la Junta de Gobierno y goza del sueldo y autoridad de Teniente de Alcalde», explica el líder de la formación, Carlos Bernabé. «Es insultante y ridículo, una broma de mal gusto para ocultar lo evidente: la alcaldesa de Orihuela tiene carnet del PSOE, pero parece que trabaja para Ciudadanos, que es quien realmente gobierna».

Ambos grupos recriminan a la alcaldesa que no tomara esta decisión antes, cuando a Noguera se le citó en octubre del año pasado como investigado por la causa que afecta al contrato de zonas verdes de la costa. En este sentido, los populares recuerdan que ya pidieron la recusación del exedil de Infraestructuras.

«Conviene recordar que fue precisamente en una sesión de la Junta de Gobierno, del seis de septiembre de 2022, cuando se desestimó, con los cuatro votos socialistas y dos de Ciudadanos, la solicitud de recusación del concejal Noguera por parte de la empresa Zaplana Caselles, siendo ya conocedores en aquellas fechas de las condiciones denunciadas por la empresa y que fueron trasladadas a la fiscalía». Además, también recuerdan que el pasado mes los socialistas evitaron con sus votos que el concejal tuviese que hacer una comparecencia en pleno sobre el contrato de viales.

«Todo el mundo sabe que, desde hace años, y también cuando el PP ostentaba la alcaldía, que la Concejalía de Infraestructuras se ha convertido en un agujero de clientelismo, destrucción de servicios públicos y gestión cuestionable de fondos públicos», replica por su parte Cambiemos, que insta a expulsar totalmente a Noguera y, por extensión, al líder de Ciudadanos y vicealcalde, José Aix, «que como responsable de su grupo municipal, está haciendo barbaridades similares en el área de Urbanismo y está minimizando la gravedad de los hechos investigados».

El exedil de Infraestructuras, además, tampoco es el único investigado formalmente. También lo está junto a Noguera la concejala de Recursos Humanos, Luisa Boné, en el caso del contrato de parques y jardines. Es por esto que el PP recrimina a la alcaldesa que no se haya aplicado la misma vara de medir para los dos. El pasado marzo, Noguera y Boné estaban llamados a declarar, pero la huelga de letrados aplazó la citación.

«Tal vez las presiones de Ximo Puig haya sido el verdadero motivo por el que Carolina Gracia haya movido ficha, por fin, aunque se aleja mucho de ser una medida verdaderamente higiénica. Todo hace ver que realmente no desea adoptar ninguna medida que pueda poner en peligro un posible nuevo gobierno de PSOE y Ciudadanos tras las próximas elecciones», deslizan los populares.

Así pues, mañana martes será la primera prueba de fuego de la nueva Junta de Gobierno en la que Noguera se espera que esté presente, aunque sin funciones. Y el tema a tratar, como es sabido, no será menor, pues está previsto que se de luz verde a la urbanización de Cala Mosca. Cuestión que ambas formaciones, PSOE y Ciudadanos, ya han avanzado que no van a obstaculizar.

En ese sentido, Cambiemos se pregunta si acaso Carolina Gracia no estaría manteniendo a Noguera en la Junta de Gobierno para salvaguardar la mayoría de Ciudadanos en este órgano y facilitar la aprobación de Cala Mosca solo con los votos de los naranjas. De ser así, señala Carlos Bernabé, «Carolina Gracia estaría dilapidando la mejor tradición del PSOE de Orihuela, con quien tenemos muchas discrepancias políticas pero a quien reconocemos que, al menos en otro tiempo, se atrevieron a confrontar con redes clientelares. Ni el municipio ni su militancia se merece este disparate».