El Alto Vinalopó concentra casi la mitad de la energía fotovoltaica en tramitación de Alicante

En toda la provincia, la potencia en tramitación es de unos 4.000 MW, similar a la de Valencia, donde una sola comarca (el Valle de Ayora) concentra una cuarta parte del total provincial.

El Valle de Ayora es la segunda comarca de la Comunitat que más potencia acumula; y cerrando el podio encontramos otra alicantina, el Vinalopó Medio, con 988,70 MW de potencia en tramitación. L'Alacantí o la Vega Baja tienen en su haber plantas cuyo conjunto en potencia en MW se encuentra entre los 500 y 800.

Desde la Coordinadora interpretan estos datos en clave de desigualdad territorial, y lamentan que mientras las comarcas anteriormente citadas albergan una elevada concentración de energía en tramitación, hay otras que no albergan ninguna. En nuestra provincia, una de ellas es la Marina Alta; aunque el caso más significativo en la Comunitat es el de Valencia y l'Horta Oest, dos de las comarcas más pobladas en el conjunto de la autonomía.

De acuerdo a los datos facilitados por La Coordinadora Valenciana per la Ubicació Racional de les Energies Renovables, esta desigual distribución también se deja notar a escala local. Según datos actualizados el pasado diciembre, el municipio más afectado es Villena, con 21 plantas en tramitación. Eso supone un total de 1.117 MW y 1.972 hectáreas dedicadas a estas instalaciones -aunque las empresas tengan disponibles hasta 3.543 hectáreas-.

Las instalaciones de Villena suponen más de la mitad de lo previsto para toda la provincia de Castellón, y un cuarto de lo previsto para la de Alicante o Valencia. Por encima de los 400 MW de potencia en tramitación también se encuentra Orihuela (428,11), mientras que la ciudad de Alicante tramita diversas plantas con una potencia total de 182 MW.

Se trata de la capital de provincia en la Comunitat que encabeza el ránking, por delante de Castellón de la Plana y sus 12 MW; y Valencia, que no alberga ninguna planta fotovoltaica.

El precio del suelo disponible sería la principal razón a la que alude la Coordinadora para explicar esta desigual distribución, por lo que las promotoras de estas instalaciones priorizarían las tierras de secano (más baratas) que las de regadío.

Otro factor que también ayudaría a decantarse por estos municipios es la existencia del latifundio. Es el caso del Alto Vinalopó, donde sus amplias extensiones pertenecientes a pocos propietarios facilitaría a las empresas el proceso de negociación.

La proximidad a los centros de producción y consumo también es un criterio a tener en cuenta por la Coordinadora, y es que el transporte de la energía, o los cambios a media y baja tensión, pueden derivar en una pérdida de hasta una décima parte de la energía producida.