Secciones
Servicios
Destacamos
Una de las principales dudas de los padres que se plantean enviar a su hijo a estudiar un año al extranjero (Reino Unido, Irlanda, Estados Unidos y Canadá son los destinos más demandados por los estudiantes españoles) es decidir cuál es el mejor curso para hacerlo. La mayor preocupación es que la estancia fuera de casa no afecte negativamente a su rendimiento de cara a la preparación de la prueba de acceso a la universidad, por eso muchos padres descartan de entrada que su hijo curse Primero de Bachillerato y especialmente Segundo en el extranjero. Pero, claro, mandarlos en la ESO les parece demasiado prematuro porque sienten que sus hijos nos están lo suficientemente preparados para pasar tanto tiempo lejos de su familia.
Entonces, ¿cuál es el curso perfecto para enviar a tu hijo a estudiar inglés a miles de kilómetros? «En la mayoría de los casos, la mejor opción suele ser 4º de la ESO. Los alumnos ya tienen autonomía suficiente como para desenvolverse con cierta soltura sin la supervisión de sus padres y las calificaciones no afectan a la nota media para entrar en la universidad. Ahora bien, se trata de una decisión que depende de muchos factores: desde el grado de madurez de cada niño, de sus circunstancias personales, de lo que quiera estudiar en el futuro e incluso del grado de confianza que tenga la familia en la empresa o agencia que gestiona el viaje», apunta Jordi Perales, profesor de los estudios de Psicología y Educación de la Universitat Oberta de Catalunya (UOC).
Aclarado este punto, los expertos insisten en la importancia de ir preparando al alumno poco a poco desde que entra en Secundaria. «Si la idea es que nuestro hijo estudie un año en el extranjero, podemos empezar con estancias cortas de verano en campamentos de inglés para que se vaya familiarizando con la experiencia. Por ejemplo, en Primero de la ESO puede apuntarse a unas colonias en inglés aquí mismo. No hace falta que se vaya fuera. El siguinete verano puede dar el salto a un campamento de 15 días en Reino Unido o Irlanda y en 3º de la ESO repetir la experiancia o incluso probar a pasar todo el verano. De esta forma, tanto el estudiante como su familia estarán más preparados para afrontar la experiencia de pasar un curso entero fuera de casa», aconseja Perales.
Noticias relacionadas
«Todos los que nos dedicamos a esto conocemos de primera mano casos de niños que nunca han ido de colonias, que no viajan solos ni en metro, que sus padres les recogen y llevan a todas partes y a los 14 años les quieren enviar un año entero con una familia a Canadá. Pues, lógicamente, no suele salir bien», advierten en las agencias que organizan este tipo de estancias.
Otro punto muy importante es «organizar bien la trayectoria académica. Es decir, verificar que el curso se puede convalidar en España. Por ejemplo, si yo me voy a EE UU a estudiar 4º de la ESO, tengo que asegurarme que al volver tendré reconocida la ESO. Lo mismo en Bachiller, porque hay estudiantes que, una vez allí, se encuentran con la desagradable sorpresa de que no le convalidan el curso aquí. E imagínate que esto te pasa en 2º de Bachillerato», advierten los expertos.
Una vez decidido el curso y el destino, se puede elegir entre vivir en una residencia o en una familia, la fórmula más habitual. «Las dos tienen sus ventajas en inconvenientes. En un colegio están más controlados, pero practican menos inglés porque suelen juntarse todos los alumnos españoles, mientras que en una familia la inmersión en total. ¿El inconveniente? Que puede haber problemas de convivencia con sus nuevos 'padres'», conviene Jordi Perales.
Estudiar un curso entero en el extranjero no es barato pese a que la mayoría de los colegios de fuera que participan en los intercambios son públicos. El precio medio se sitúa en 10.000 euros. La opción más barata es solicitar una plaza en el programa de becas de la Fundación Amancio Ortega para estudiar 1º de Bachillerato en EEUU o Canadá, en el que ya han participado 4.700 estudiantes de todo el país. Esta beca cubre todos los gastos: viaje, tasas de escolarización, matrícula, alojamiento y manutención en una familia anfitriona, seguro médico y de accidentes, convalidación del año académico y apoyo durante la estancia.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
La CHD inicia las obras para poder vaciar el embalse de El Tejo
El Norte de Castilla
La proteína clave para la pérdida de grasa
El Comercio
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para registrados
¿Ya eres registrado?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.