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Las celebraciones navideñas y todo lo que conlleva prepararlas supone mucha actividad y cierto caos, sobre todo para los anfitriones, que estos días se enfrentan a una lista interminable de cosas por hacer para recibir y atender en su casa a los invitados en las ... fechas más señaladas: pensar el menú, hacer las compras, colocar la decoración, comprobar que el mantel no tiene manchas, repasar la cubertería, lavar las copas, recoger el salón, limpiar a fondo el baño...
«Organizarse bien es esencial para que todos podamos disfrutar las fiestas», insisten en The Home Academy, la primera escuela española especializada en organización y bienestar en el hogar. Expertos en protocolo nos dan las claves para ejercer de anfitriones sin demasiados agobios
El primer paso antes de organizar nada es elaborar un presupuesto con todos los gastos navideños... y cumplirlo para evitar una cuesta de enero más empinada de lo que puede asumir nuestro bolsillo. «Debe incluir todas las partidas: comida, regalos, decoración, reposición de piezas de menaje (vajilla, cristalería, manteles...), ropa de fiesta, salidas... Y cuando lo tengas todo bien apuntado, míralo en conjunto y equilibra los gastos allí donde sea necesario», aconsejan las expertas de The Home Academy.
La cesta de la compra es uno de los grandes desembolsos, «de manera que planificar los menús navideños con antelación te hará ahorrar tiempo y dinero. Para ello, decide las recetas que vas a preparar y haz una lista de la compra con las cantidades exactas que necesitas según el número de comensales. Establecer unos días para ir a la compra y otros para cocinar también te ayudará con la organización. En este sentido, es aconsejable elaborar parte de las recetas días antes para que cuando llegue la celebración se puedan gestionar mejor los tiempos en la cocina».
Antes de ponerte con la decoración navideña de la mesa o el salón, aprovecha para hacer una buena limpieza y devolver el orden a la casa. «Lo primero es hacer un listado con las tareas pendientes, después se reparten entre los diferentes miembros de la familia y se pone una fecha para hacerlas. De esta forma, tendremos la casa a punto el día de la celebración».
Los expertos recomiendan centrarse especialmente en la cocina, salón, baños y recibidor. «Una cocina organizada es la clave para una celebración sin estrés, por eso conviene verificar días antes de las fiestas que tenemos todos los utensilios e ingredientes que vamos a necesitar. Despeja las encimeras para facilitar la preparación de los platos, limpia y comprueba que el horno funciona correctamente para evitar sorpresas desagradables de última hora y reorganiza el frigorífico. Conviene dejar espacio suficiente para colocar tanto los platos ya elaborados como las sobras. Y no podemos olvidarnos de mantener las bebidas frías», recuerdan en Kronos Homes.
Luces, centros de flores, el árbol, nacimiento, guirnaldas, velas... Antes de lanzarte con la decoración, los expertos recomiendan pensar bien dónde se van a colocar todos esos adornos, porque la idea es generar un ambiente acogedor, no entorpecer la dinámica de la casa. «De poco sirve poner un árbol espectacular si las ramas molestan a las personas que están sentadas en el sofá o no se puede pasar cómodamente a su lado», coinciden los expertos.
En The Home Academy lo tienen muy claro: «Pon la mesa al menos dos horas antes de que lleguen los invitados para evitar ir con prisas. Coloca primero el muletón (protector) y por encima el mantel. Si tienes espacio suficiente, recuerda dejar unos 70 centímetros de separación entre comensales para que estén más a gusto y si vas a poner velas, es mejor que sean sin perfume para que no interfieran en los sabores y aromas de la comida o cena».
Otro consejo de las expertas. «Utiliza una mesa servidera como apoyo a la principal. En ella se puede colocar todo lo que se vaya a utilizar en algún momento de la comida o la cena y nos ayudará a despejar y a hacer más armoniosa la mesa principal. En la servidera se pueden tener cubiertos y utensilios de servir; platos hondos, paneras, champaneras, enfriadores para vino, botellas, sacacorchos, decantadores, jarras de agua, servicio de café y té...».
Si se esperan muchos invitados y el espacio es limitado «podría ser útil reorganizar los muebles para crear zonas más despejadas y que resulte más cómodo moverse por la casa», añaden en Kronos Home.
En muchas familias es tradición sacar juegos de mesa a los postres, así que prepáralos y comprueba que están completos y que no faltan cartas o fichas.
Tener alguna melodía relajada de fondo durante la comida o la cena puede generar una atmósfera muy agradable.
Siempre que se pueda, los anfitriones deberían reservarse un tiempo para ellos antes de que lleguen los invitados.
Esto es fundamental para mantener la casa ordenada y limpia. «Si se acaba muy tarde de cenar, deja los platos, cubiertos y copas en el lavavajillas o en remojo en el fregadero para lavarlos al día siguiente con facilidad».
Prepara tápers para aprovechar y guardar bien todas las sobras, que suelen ser abundantes y quedan muchos días por delante.
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