Secciones
Servicios
Destacamos
Vienen en frasquitos chiquitines, como las pócimas mágicas de los cuentos. Y con muy poca cantidad, aplicada en el lugar y el momento preciso, prometen eso mismo: magia.Más o menos.Porque en realidad los potenciadores de orgasmo –uno de los productos estrella de las marcas de bienestar sexual– funcionan de un modo muy científico. Estas sustancias, incluidas bajo una nueva etiqueta, la neurocosmética, sirven para 'despertar' las zonas erógenas y prometen más y mejores orgasmos... ¡a mujeres y también a hombres! Aunque, en principio están pensados para el placer femenino y para 'espabilar' el clítoris –se estima que solo el 25% de las mujeres llegan al clímax solo con la penetración–, estos productos que van a hacer furor en el Black Friday y las Navidades también 'activan' algunas zonas erógenas masculinas. Si ya has oído hablar de ellos y tienes dudas o si no los conoces en absoluto, dos expertos nos ofrecen una pequeña guía de uso:
Los potenciadores del orgasmo estimulan el riego sanguíneo en algunas partes del cuerpo, haciendo que el flujo de sangre vaya hacia estos puntos. Esto hace que la sensibilidad aumente. «Se consigue con geles con efecto calor, frío y vibración», explica Lucía Jiménez, sexóloga de la firma de bienestar sexual Diversual. Algunos ofrecen alguno de estos efectos y otros combinan varios. El caso es que activan receptores nerviosos especializados, incluidos los termorreceptores (que responden a cambios de temperatura) y los mecanorreceptores (que reaccionan al tacto, la presión y la vibración).
La mayoría se aplican de forma externa en la vulva, el clítoris y el glande. Sí, el glande, porque son unisex, en contra de lo que mucha gente cree. Pero también hay potenciadores de uso interno, que pueden aplicarse en la vagina. Un buen consejo: leerse bien las instrucciones... ¡y fijarse si es de uso externo o interno! Más que nada porque no todos valen para todo y pueden causar efectos desagradables. «Algunos productos se pueden aplicar en otras zonas erógenas, como los pezones, para intensificar las sensaciones durante el juego previo», apunta Jiménez. Advertencia: son concentrados y con un par de gotas dos o tres minutos antes de la 'acción' suele ser suficiente.
«Es importante verificar si el producto es comestible o seguro para el contacto oral, ya que no todos los potenciadores están formulados para ser ingeridos», aconseja la sexóloga.
«El deseo es algo muy personal y puede depender de varios factores: psicológicos, sociales, culturales, así como la excitación fisiológica, que responde a mecanismos físicos en el cuerpo», explica Adnane Kabaj, cofundador de IntyEssentials, que ofrece, entre otros artículos de cuidado sexual, potenciadores de orgasmo. Es decir, el deseo va por libre, pero si el cuerpo le ayuda... mejor, claro. Tal y como explica, para que esta excitación ocurra de manera óptima en zonas erógenas, es esencial una buena vascularización, una adecuada liberación de neurotransmisores y la activación de terminaciones nerviosas especializadas... Ufff, suena como si tuviese que haber una conjunción astral para que las zonas erógenas estén receptivas, ¿no? En realidad, no. Tienen sus propios mecanismos para 'activarse', pero se pueden potenciar. Y, bueno, el efecto placebo también ayuda.
Los potenciadores convencionales suelen incluir mentol sintético y glicoles que pueden provocar una sensación de calor mediante irritación. Por eso ahora la nueva generadión de potenciadores son ya neurocosméticos y usan otros otros ingredientes, naturales, como estos.
Isovanilly éter, derivado de la vainilla
Su papel es fundamental, ya que proporciona una sensación de calor suave y prolongada, activando los termorreceptores sin ningún riesgo de irritación», indica Adnane Kabaj, de IntyEssentials.
Extractos de laurel y romero
Promueven la microcirculación sanguínea en la zona erógena, optimizando la respuesta sensorial vascularización saludable.
Acmella
Es una planta que produce un ligero efecto de hormigueo constante que no solo incrementa la sensibilidad en el clítoris, sino que ayuda a canalizar la atención del cerebro hacia la zona de placer, instalando una respuesta fisiológica positiva y sostenida. «Esta característica es de gran ayuda para personas que experimentan deseo hipoactivo, así como para quienes padecen vaginismo o dispareunia, ya que relaja la zona», apunta Kabaj.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
La CHD inicia las obras para poder vaciar el embalse de El Tejo
El Norte de Castilla
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para registrados
¿Ya eres registrado?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.