Un entrenador de Primera División, entre las víctimas de los robos de un clan familiar desarticulado en la Comunitat

La 'operación Nebok' comenzó cuando la Guardia Civil tuvo conocimiento de una serie de robos y hurtos en viviendas ubicadas en las citadas provincias por un mismo clan familiar, de origen balcánico. Esta banda criminal estaba organizada de una forma jerarquizada y con unas funciones bien definidas para cada escalón, según apunta el Instituto Armado en un comunicado. Los supuestos autores utilizaban distintos 'modus operandi' para cometer los hechos delictivos, como el procedimiento del resbalón, descuido o forzando puertas y ventanas.

Fruto de esta operación, los investigadores descubrieron que se trataba de un grupo itinerante nacional e internacional. Ejecutaban sus delitos ayudados de walkie-talkies, utilizando y deshaciéndose de tarjetas de teléfonos, vehículos y cambiando continuamente de domicilios, país y zonas de comisión de los delitos.

Los supuestos autores vivían y acumulaban el efectivo por el dinero obtenido en los robos. Además, usaban diferentes identidades falsas utilizando carnés de conducción y documentos de identidad, que habían sido usados para pernoctar en hoteles y pensiones. Este clan también engañó a una tercera persona que les vendió dos relojes, de marca Rolex, por 40.000 euros, pagados con dinero falso. También han sido detenidas aquellas personas que compraron las joyas robadas en las viviendas.

Finalmente, el pasado 2 de mayo la Guardia Civil de Valencia realizó cuatro registros domiciliarios en Torrevieja, en localidad castellonense de Vinaroz y en los municipios valencianos de Alcácer y Sagunt.

En los registros se ha encontrado joyas y relojes por un valor de 900.000 euros, walkie-talkie, placas de matrículas falsas y documentación personal falsificada y cinco vehículos con un valor de 50.000 euros. Además, se hallaron diversos objetos como herramientas de alta gama, compresores, grupos electrógenos, equipamiento deportivo, bicicletas, patinetes, videoconsolas, catalizadores, detectores de metales, un quads y todo valorado en más de 150.000 euros. Por último, se encontraron más de 50.000 euros en efectivo.

El resultado de las inspecciones fue la detención de 15 personas de edades comprendidas entre 19 y 63 años y de nacionalidades checa, croata, serbia y bosnia. Los apresados están imputados por los delitos de pertenencia a organización criminal, delito continuado de robo con fuerza en las cosas, delito continuado de hurto, blanqueo de capitales, falsedad documental, receptación y estafa.

Tras las gestiones realizadas por el equipo investigador hasta la fecha se han podido determinar ya parte de la procedencia de las joyas recuperadas que habían sido robadas en una vivienda de un conocido entrenador de fútbol de la máxima categoría.

La investigación ha sido llevada a cabo por agentes de la Guardia Civil de la Compañía de Llíria. Las diligencias han sido entregadas en el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 2 de Llíria. Se ha decretado el ingreso en prisión de 14 de los detenidos.