Desmantelan una peligrosa banda en Alicante que se hacía pasar por policías para robar a traficantes

La operación policial, que ha requerido de varios meses de intensa investigación y se ha llevado a cabo en distintas fases, ha finalizado con 49 detenidos, 39 hombres y 10 mujeres, de origen español y árabe y de edades comprendidas entre los 23 y 78 años. Todos los apresados fueron puestos a disposición del Juzgado de Instrucción en funciones de guardia decretándose el ingreso en prisión de 15 de ellos por delitos de tráfico de drogas, robo con violencia e intimidación, pertenencia a organización criminal, maltrato animal, falsificación de moneda y tenencia ilícita de armas.

A lo largo de la investigación se han realizado 34 registros en los que se han intervenido distintas clases y cantidades de sustancias estupefacientes, armas de fuego, dinero falsificado, 20 vehículos, 75.000 euros y diversos terminales electrónicos. Uno de los principales líderes de la trama disponía de diversas empresas, algunas de ellas sin ningún tipo de actividad económica, a través de las cuales blanqueaba el dinero proveniente de su actividad ilícita

Se trata de un entramado delictivo asentado en las ciudades de Alicante y Elche con amplia experiencia delictiva, destacando la violencia con la que ejecutaban los robos, llegando a utilizar armas y uniformes para hacerse pasar por miembros de las fuerzas y cuerpos de seguridad.

La explotación de la investigación sobre esta organización delictiva se realizó en diferentes fases, cuyo inicio fue el pasado mes de octubre tras tenerse conocimiento de la existencia de un entramado delincuencial asentado en las localidades de Alicante y Elche formado por diversas ramas delictivas.

La primera de ellas se dedicaba al tráfico de drogas a media escala y cuyos miembros distribuían la sustancia estupefaciente, principalmente cocaína, por la localidad de Elche y sus pedanías, lo que les proporcionaba grandes ingresos económicos que gestionaban a través de empresas, alguna de ellas sin ningún tipo de actividad, y les permitía la compra de multitud de vehículos de alta gama y propiedades inmobiliarias.

La segunda rama delictiva, afincada en Alicante, se dedicaba a la venta de sustancias estupefacientes obtenida a través de la comisión de robos violentos 'vuelcos' a otros traficantes. Para llevar a cabo los asaltos utilizaban armas y uniformes para hacerse pasar por miembros de las fuerzas y cuerpos de seguridad. Una vez que disponían de la sustancia estupefaciente robada, la distribuían en distintos puntos de venta de las localidades de Alicante y Mutxamel.

Las pesquisas policiales llevaron al descubrimiento de que los componentes de la organización utilizaban armas de fuego y empleaban una gran violencia a la hora de ejecutar los 'vuelcos', causando lesiones graves a sus víctimas para amedrentarlos y conseguir que les indicasen donde tenían oculta la sustancia estupefaciente y el dinero.

Además, sus miembros disponían de diversas plantaciones hidropónicas en viviendas de la propia organización, una de ellas estaba custodiada por uno de los miembros de la organización fugado de la justicia por delito de homicidio y era la base de campeonatos de peleas clandestinas de gallos, en las que los animales eran drogados para el desarrollo de las mismas.

En el transcurso de la investigación se han llevado a cabo un total de 34 registros en las localidades de Alicante, Elche, Torrellano, Monforte del Cid, Novelda, Campello, Mutxamel, Elda y San Vicente del Raspeig.

En las inspecciones, los agentes se han incautado de 25.6 kilos de marihuana, 43.6 kilos de hachís, 300 gramos de cocaína, 144 gramos de metanfetamina, diez armas de fuego, 75.000 euros en efectivo, 14.800 euros en billetes falsificados, 20 vehículos y diversos terminales electrónicos. Además, se realizó el bloqueo de numerosas propiedades adquiridas con dinero proveniente de su actividad ilícita y se recuperaron 40 gallos con síntomas evidentes de haber sido maltratados.

Asimismo, se logró el esclarecimiento de cuatro robos con violencia en viviendas y se averiguó que dos de las escopetas localizadas estaban sustraídas de un robo con fuerza realizado en Albacete y que dos de los terminales telefónicos provenían de otro robo con violencia con arma de fuego cometido en el exterior de una discoteca de la ciudad de Alicante.

La investigación ha sido llevada a cabo por el Grupo I de Crimen Organizado y por el Grupo de Blanqueo de Capitales de la Brigada de Policía Judicial de la Comisaría Provincial de Alicante, contando con la participación del Grupo Operativo Especial de Seguridad (GOES) , de Medios Aéreos de Valencia y Alicante, así como de distintos efectivos de las Brigadas de Seguridad Ciudadana de Alicante y Elche.