La conexión de Altea con el laboratorio de falsificación de euros más grande de Europa

La investigación está relacionada con la desarticulación el pasado mes de septiembre de un importante laboratorio que habría producido más de ocho millones de euros falsos en billetes de 500.

En la primera fase de la operación se detuvo a doce personas, entre las cuales se encontraba el principal investigado e impresor de los billetes, así como los principales distribuidores. En esta segunda, los investigadores identificaron a dos personas que trabajaban en connivencia con la organización y que se encargaban de facilitar la compra en el extranjero del material utilizado por el grupo criminal para la fabricación de los billetes falsos de 500 euros, según informan fuentes policiales.

Estas compras se realizaban mediante la creación de un entramado de empresas pantalla que les proporcionaban la capacidad necesaria para interactuar con solvencia mercantil ante otras empresas y poder ocultar la identidad de los investigados, puesto que acumulaban antecedentes penales por hechos similares.

Las pesquisas llevadas a cabo revelaron indicios de la compra de más de una tonelada de papel de alta calidad y seguridad. El grupo criminal investigado adquirió este material en China mediante empresas creadas solo para este cometido.

También se encontraron rastros de trazabilidad de la adquisición en el extranjero de maquinaria industrial llevada a cabo con la misma operativa mercantil, así como la compraventa de una máquina offset utilizada para imprimir los billetes y una máquina láser empleada para confeccionar las planchas metálicas.

Como resultado de los registros se ha intervenido maquinaria especializada para la confección de los billetes falsos, en concreto una impresora y otra plastificadora, según indica la Policía Nacional.