Golpe policial contra una banda armada de okupas que atacaba a otras por el control de la zona norte de Alicante

Según informa el cuerpo de seguridad mediante un comunicado han sido siete las personas detenidas, de origen argelino y de 18 a 64 años de edad. Los arrestados, en situación de irregularidad, operaban en Alicante como ciudad puente entre Francia y Argelia.

Los miembros tenían una estructura clara para llevar a cabo los hechos delictivos. Mientras unos se encargaban de tareas violentas, otros ocupaban viviendas en el barrio donde acogían otros inmigrantes irregulares y, aprovechándose de su vulnerabilidad, los metían en la banda.

Además, la organización argelina se dedicaba al tráfico de drogas en la zona norte de Alicante. En este barrio la banda tenía varios domicilios donde guardaban los alijos y las armas y desde donde operaban y realizaban distintas tareas criminales.

De hecho, tras las investigaciones correspondientes, la Policía Nacional consiguió hallar las viviendas donde residían, así como la identidad de los integrantes, llevando a cabo una intervención en cinco domicilios en los que intervinieron 17 kilogramos de éxtasis en pastillas, medicamentos de las benzodiacepinas, cuatro armas de fuego con munición y machetes y hachas que empleaban para robar en las casas de la zona.

El operativo policial arrancó en julio debido a una escalada de violencia entre ciudadanos argelinos de la zona norte de Alicante. La Policía Nacional halló que no se trataban de hechos aislados, si no de episodios de un mismo entramado en el que esta banda atacaba a otros grupos de su mismo país asentadas en la ciudad para «hacerse fuerte».

Los hechos investigados tuvieron lugar desde verano. El primero de estos episodios violentos tuvo que ver con una reyerta entre ciudadanos magrebíes en una peluquería, donde un argelino fue atacado con un hacha, quien aseguró que días más tarde los mismos autores le dispararon desde tres coches.

Tras este atque se sucedieron más. Dos meses después de este se produjo otra nueva pelea en la que la víctia sufrió un gran corte de oreja a cuello por el que tuvo que ser hospitalizado en Alicante. Tan solo unos días después se dispararon varias armas de fuego contra ciudadanos magrebíes. En uno de los domicilios cercanos al conflicto los agentes hallaron una pistola en el buzón de una casa okupada.

Una nueva reyerta llevó a los agentes a la zona, donde encontraron a una víctima sangrando abundantemente y testigos del barrio aseguraron que individuos salieron de un vehículo y comenzaron a agredir a varias personas a machetazos.

Los últimos sucesos investigados tuvieron que ver con varios episodios de amenazas y coacciones, así como con el robo de una vivienda en el que varios integrantes de la banda se hicieron pasar por policias para entrar a punta de pistola en el domicilio.

Con todo ello la Comisaría Provincial de Alicante movilizó un gran número de agentes de distintos grupos, destacando el Grupo de Delincuencia Especializada y Violenta y el Grupo de Crimen Organizado de la Brigada de Policía Judicial, así como agentes adscritos a la Unidad de Prevención y Reacción, al Grupo Operativo de Respuesta y a la Unidad de Medios Aéreos, todos del Distrito Norte de Alicante.

En los registros domiciliarios se hallaron las armas y se arrestaron a seis personas, a quienes se les imputan la comisión de los presuntos delitos de pertenencia a grupo criminal, lesiones, detención ilegal, tenencia de armas, favorecimiento de inmigración ilegal, la ocupación de viviendas, tráfico de drogas y delitos contra el patrimonio.

El séptimo individuo fue arrestado tras un incidente con un arma días más tarde. En este, un inidividuo resultó herido en una reyerta con varios disparos. Los agentes comprobaron al herido e inmediatamente lo trasladaron al hospital. Tras las gestiones, hallaron que era uno de los integrantes de esta banda violenta.