El obispo de Alicante regala turrones de Xixona al Papa: «¡Santidad, esto no engorda!»

Óscar Bartual Bardisa

Alicante

Viernes, 31 de enero 2025, 12:46 | Actualizado 12:57h.

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El Papa recibió este jueves un dulce regalo llegado desde Alicante. Ha sido durante la visita del obispo de la diócesis Orihuela-Alicante, José Ignacio Munilla, a Roma cuando se ha producido este encuentro en el que se ha obsequiado a Su Santidad con un producto de la 'terreta'.

Así, Munilla ha entregado al Papa Francisco una caja de madera llena de turrones de Xixona y de Alicante. Entre risas, el Papa le preguntó a Monseñor si estos dulces tradicionales engordaban. Sin ningún titubeo, el obispo contestó: «¡Santidad, los turrones de Alicante no engordan!».

Con esta anécdota se ha cerrado la visita de Munilla junto con un grupo de seminaristas valencianos a Roma, donde el Papa Francisco les ha recibido para conversar con ellos. Como muestra de su afecto el obispo ha regalado a Su Santidad en nombre de la provincia un trozo de su rica cultura gastronómica, guardados en una bonita caja de madera que le han podido entregar en persona.

El obispo viajó a Roma junto con un grupo de seminaristas de la provincia eclesiástica de Valencia el pasado 29 de enero. Allí, estos han podido compartir «dos horas enteras con el Papa», quien ha respondido a las preguntas de los que han querido solicitar consejo al Papa.

Y lo ha hecho de «forma entrañable», según describe el obispo en su cuenta de 'X'. Monseñor ha querido destacar una de las historias compartidas por un seminarista, quien contó al Papa Francisco su «sufrimiento porque su madre no haya aceptado la decisión de ir al seminario, por motivo de que había soñado otros caminos para su hijo».

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Tras escuchar la historia de este valenciano Su Santidad ha relatado que él mismo vivió «esa misma situación» y ha contad como su madre, a pesar de ser católica se opuso «a la vocación de Jorge Mario Bergoglio y no quiso visitarle en seminarios, pero finalmente el día de su ordenación sacerdotal se puso de rodillas y le pidió la bendición».

Ante esta historia el Papa ha aconsejado al joven «oración, ternura y paciencia». Más tarde se ha hecho una foto de familia con todos los seminaristas en el Vaticano.