La huelga de médicos cambia de fechas: el sindicato retrasa la huelga para que no se le culpe del colapso asistencial

No obstante, y con la intención de evitar que se les culpe del «colapso» asistencial que vive la Comunitat, han decidido retrasar los paros previstos. En lugar de realizarse los días 17 y 18 de enero tendrán lugar el primer lunes de marzo, abril y mayo, es decir, los días 6, 3 y 8 de esos respectivos meses. Además, se desarrollarán concentraciones de protesta en la puerta de hospitales y centros de primaria el 15 y 22 de febrero y el 1 de marzo, entre las 8.30 y las 9.30 horas.

CESM asegura que la Conselleria de Sanidad es "incapaz" de comprometerse a dar solución a los principales problemas que atenazan al colectivo médico, carente de ideas y sin voluntad real de llegar a acuerdos que impidan el deterioro y degradación de la sanidad pública, lo que provoca la creciente fuga de médicos del sistema sanitario.

El gremio ha planteado un conflicto laboral a la Comunidad por motivos de «sobra conocidos por todos», y que confluyen en el principal problema que afecta al sistema sanitario. «Nos estamos quedando sin médicos», denuncian desde el sindicato.

Desde la organización sindical sostienen que tal vez el problema no sea solo y exclusivamente las condiciones de trabajo, pero desde luego las "pésimas circunstancias" en las que se ejerce la medicina, en su opinión, «hacen que nuestros compañeros decidan irse bien a otras comunidades, a países de nuestro entorno o incluso a la sanidad privada».

CESM asegura que la fuga de médicos del sistema sanitario público a la medicina privada y a otros países -especialmente los facultativos que acaban su formación MIR- es la verdadera huelga, no declarada, «que urge atajar».

Las reivindicaciones planteadas ante la Administración por el Sindicato Médico de la Comunidad Valenciana CESM-CV, van encaminadas principalmente -según apuntan- a mejorar las condiciones laborales, así como a evitar el maltrato endémico mantenido desde la Administración.

Desde el sindicato denuncian que la pandemia ha puesto en evidencia y ha dejado al descubierto la realidad del sistema sanitario, inmerso en una "crónica sobrecarga asistencial", con aumento de las demoras en la asistencia, con un crecimiento exponencial de las listas de espera que se maquillan derivando a los pacientes en proporciones nunca vistas hasta ahora a la medicina privada, con aumento del número de pacientes a atender inasumibles para los médicos, «incluso peores que antes de la pandemia».

El colectivo afirma que no han planteado un conflicto contra la población, si no contra la sanidad pública. Además, denuncia que a sus dirigentes se les criminaliza por pretender ejercer su derecho a la protesta.

Por lo tanto, rechazan el documento recibido la mañana del 12 de enero y exigen a la conselleria que abandone su «retórica vacía de contenido, cese en mensajes puramente publicitarios, de índole política y electoralista». También le requieren para que proceda a negociar y dotar de contenido «una propuesta seria y acorde a las necesidades que los facultativos reclamamos».

En caso contrario, el paro, previsto en principio para los días 17 y 18, aunque los convocantes estudian dejar retrasarlo algunas fechas, será imparable. Y añaden que no se deben olvidar que son el eje de la sanidad.

Por ello, desde el sindicato califican de «inaceptable e inasumible» la oferta presentada por la Conselleria de Sanidad y aseguran que redundarán en agravar el principal problema que atenaza a la sanidad pública. «Le volvemos a emplazar para que evite el conflicto y atienda las justas reivindicaciones de nuestro colectivo», sentencian.