Los médicos de la Comunitat irán a la huelga en enero por la falta de refuerzos y la presión asistencial

La formación no quiere perjudicar a los pacientes en el periodo navideño, momento en el que los centros de salud recortan horario y las plantillas cuentan también con unos días de descanso. También son conscientes de la elevada presión asistencial que viene registrando el sistema por el repunte de los virus respiratorios y dolencias como la bronquiolitis, de ahí que retrasen la jornada de huelga hasta mediados de enero. Con estos plazos, la formación también quiere ofrecer un margen de tiempo a la conselleria para poder alcanzar un acuerdo que evitaría que estos paros tuvieran lugar.

La falta de refuerzos y la cada vez mayor carga de trabajo, por tanto, empuja a los médicos a convocar estos paros, que vendrán acompañados de «plantes» a las puertas de los centros sanitarios y manifestaciones, como explica el secretario general de CESM-CV, Víctor Pedrera.

Este portavoz advierte de que la huelga se podrá ampliar indefinidamente si el departamento autonómico no atiende las reivindicaciones del colectivo, que se centran sobre todo en mejoras de las condiciones laborales e incrementos retributivos.

Frente a ello, y antes de conocer la noticia, Mínguez apuntaba por la mañana que la Comunitat, en el momento actual, «no reúne las circunstancias de otras comunidades para que exista una convocatoria de huelga» como la de Madrid. «Nosotros nunca hemos tenido cerradas las urgencias extrahospitalarias y ellos sí, las abrieron al 50%, y eso fue un motivo que originó la huelga». «Es más, la Comunitat lo único que ha hecho desde mayo es ampliar el número de plazas, y hemos abierto incluso más puestos de Atención Continuada de 24 horas». Asimismo, subrayó que la Comunitat es una de las autonomías que apostó por consolidar la plantilla que tenía contratada en la época Covid y convertirla en plazas estructurales. «Hemos apostado fundamentalmente por Atención Primaria, hemos disminuido los ratios y estamos en unos ratios prácticamente de los mejores de toda España», apuntó.

Por el contrario, y en todos los niveles asistenciales, el Sindicato Médico de la Comunitat reclama un aumento de plantillas de facultativos «subsanando la marginación y el agravio comparativo con otras categorías profesionales -que se ha registrado- en las sucesivas ampliaciones de personal sanitario tras el Covid». De ellas, añaden, «se destinaron a personal facultativo un insuficiente 10% de las plazas destinadas a Atención Hospitalaria; y en las destinadas a Atención Primaria, tan sólo el 18% a Medicina Familiar y un exiguo 1,6% a Pediatría».

Quieren también suprimir las limitaciones para posponer la jubilación hasta los 70 años, evitar incompatibilidades con hospitales privados que participen en planes de choque, la implantación de un máximo de 35 horas a la semana en horario ordinario, reducir la valoración de los conocimientos de valenciano en las distintas oposiciones por debajo de la valoración de la tesis doctoral y de los méritos de formación en su conjunto, y un incremento retributivo lineal en forma de complemento para todos los médicos adjuntos adscritos a la conselleria de 10.000 euros al año.

Para Atención Primaria, reclaman que se destine el 25% del presupuesto total de Sanidad, contar con transporte a domicilio y que se limiten las agendas de los profesionales a 26 pacientes al día en Medicina de Familia y 20 en Pediatría, con cupos máximos de 1.300 pacientes por médico de familia y 800 por pediatra en los centros de salud. También demandan la presencia de agentes de seguridad en todos los centros y durante todo el horario de apertura con el objeto de evitar las agresiones, que se han visto incrementadas de forma exponencial, así como que se respeten los horarios de jornada de 8.00 a 15.00 horas, y de 14.00 a 21.00 horas.

Quieren acabar también con los contratos precarios de Atención Continuada, que los PAC abran de lunes a domingo las 24 horas del día y establecer un sistema de triaje para toda la demanda solicitada sin cita previa a cargo del personal de Enfermería, tanto en los centros de salud como en las urgencias extra hospitalarias (PAC y PAS).

Para los facultativos que trabajan en los hospitales, solicitan un aumento del pago de las horas de guardia presencial obligatoria al 150% de la hora ordinaria, la hora de guardia presencial voluntaria al 200% de la hora ordinaria y la hora de guardia localizada al 50% del precio de la hora ordinaria; regular las guardias localizadas, garantizar un máximo de tres guardias presenciales obligatorio al personal de staff, y voluntarias hasta cinco, evitar la aplicación sistemática de las 'necesidades de servicio' y la desaparición de los contratos de Guardia Médica, «utilizados tanto en horarios como en prestaciones ordinarias de forma fraudulenta». Frente a ello, exigen «convertir estas plazas en estructurales con los mismos derechos al resto de trabajadores del servicio, tal y como contempla la legislación».

Para las urgencias extrahospitalarias, el sindicato exige la eliminación de las unidades SVA-Enfermería y sustituirlas por unidades de SAMU, para lo que habrá que adecuar las plantillas de médicos. Para los MIR reclaman, entre otras cuestiones, un incremento retributivo de 7.000 euros al año.