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Lunes, 14 de noviembre 2022, 13:51
Cuatro de cada diez urgencias atendidas en la Comunitat por consumo de drogas guardan algún tipo de relación con el alcohol. Según apuntan desde la conselleria de Sanitat, esto es así porque el alcohol es el «comodín» de la mayor parte de consumos: lo toman ... habitualmente personas fumadoras; suele combinarse con la ingesta de cocaína y las personas heroinómanas, muchas veces, beben en exceso entre dosis y dosis de heroína.
Por otra parte, cerca de 1.200 alicantinos acuden cada año a los recursos asistenciales que ofrece Sanidad para dejar el alcohol. La cifra representa el 34 % de toda la Comunitat, donde son alrededor de 3.400 las personas que se sirven de esos recursos. Estos datos se dan a conocer con motivo del Día Mundial sin Alcohol que se conmemora cada año el 15 de noviembre.
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La edad media de inicio del tratamiento se sitúa en los 47,7 años, sin diferencias significativas ni por género ni por provincia de residencia. Además, casi la mitad de las personas tiene trabajo y estudios (40 % ha terminado Primaria; 20 % ha finalizado la Educación Secundaria y un 8 %, la carrera).
El tratamiento del alcoholismo en la Comunitat Valenciana se canaliza a nivel asistencial, como puerta de entrada, a través de 33 Unidades de Conductas Adictivas (que apoyan a los equipos de atención primaria para la asistencia en régimen ambulatorio) y seis Unidades de Alcohología. También existen 5 unidades de atención especializada con internamiento hospitalario y ocho comunidades terapéuticas en régimen residencial. Más allá de la vertiente asistencial, la Dirección General de Salud Pública y Adicciones, en coordinación con 85 Unidades de Prevención Comunitaria de Conductas Adictivas, trabaja sobre el terreno en más de 300 municipios.
Desde Sanidad recuerdan que el alcohol es un factor causal de más de 200 enfermedades y trastornos. Está asociado con el riesgo de desarrollar problemas de salud tales como desajustes hormonales, mentales y comportamentales, y puede desencadenar enfermedades como la cirrosis hepática, algunos tipos de cáncer y enfermedades cardiovasculares.
Además, una reciente investigación publicada en la revista Neurology concluye que las personas de entre 20 y 30 años que beben cantidades moderadas o elevadas de alcohol pueden tener más probabilidades de sufrir un ictus cuando son adultos jóvenes que las personas que toman cantidades bajas o no beben alcohol. A este respecto, la última Encuesta sobre alcohol y otras drogas en España (de 2020) revela que el 84,5 % de la población valenciana mayor de 18 años ha consumido alcohol en el último año y el 22,6 % ha sufrido una intoxicación.
Desde la Confederación de Alcohólicos, Adictos en Rehabilitación y Familiares de España (CAARFE) alertan de los efectos del «mal llamado» consumo moderado, al cual se le atribuyen uno de cada ocho cánceres causados por el alcohol. Además, puntualizan que una sola copa al día ya aumenta el riesgo de cáncer de mama y de cáncer colon y recto en un 5%.
«La ciencia ha demostrado que cualquier cantidad de alcohol puede ser perjudicial para la salud y que cuanto menos se beba, mejor». Son palabras de Francisco Pascual, presidente de Socidrogalcohol, quien incide en que la ingesta de alcohol «debe quedar totalmente prohibida para menores de edad, mujeres embarazadas, personas que tengan que conducir o personas que tengan que manejar cualquier tipo de maquinaria en su trabajo».
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