El PP llama al PSOE a rebelarse contra la «barbaridad» de Sánchez

Precisamente fue la intención de rebajar las penas atribuibles al delito de sedición por el que fueron condenados los líderes del 'procés' la que hizo saltar por los aires las negociaciones para la renovación del CGPJ. Viéndose cargados de razones ahora para haberse levantado de la mesa, los populares subrayaron que Sánchez «no es digno de la tradición democrática del PSOE ni el PSOE puede callar ante este episodio sin ser cómplice expreso de esta barbaridad política».

Alberto Núñez Feijóo, que se encontraba anoche volando desde América Latina manifestó su disgusto nada más bajar del avión en un mensaje en su cuenta de la red social Twitter. «Siento tener razón en que Sánchez pone siempre su interés político por encima del de España», se reafirmó antes de añadir que «es una irresponsabilidad histórica corregir el trabajo del Supremo de la mano de los condenados y una gran ingenuidad porque el independentismo nunca, jamás, se conforma».

Para la dirección del PP «ni la Constitución ni el Estado de derecho pueden rendirse a las necesidades de ningún dirigente político, y menos a las de aquellos que se levantaron contra nuestra nación». «En ningún país europeo –agregan las mismas fuentes– se tocaría el delito de sedición de la mano de los sediciosos».

Con Feijóo volando de regreso de su gira por América Latina, fue Cuca Gamarra la primera voz de los populares en reaccionar al anuncio. «Ahora, un Código Penal a la medida de los sediciosos para sacar unos Presupuestos... ¡Alto precio para los españoles!», escribió en Twitter. Para el líder de Vox, Santiago Abascal, Sánchez es un «traidor».

Este viernes, en una entrevista en Antena 3, Gamarra insistía en que las intenciones del presidente del Gobierno son de enorme gravedad, y además el hecho de que vaya a hacer la reforma mediante una proposición de ley, evitando así los informes preceptivos, aunque no vinculantes del CGPJ y del Consejo de Estado. «Lo que está detrás es al final utilizar todos los resortes que tiene a su alcance y con una intromisión en otros poderes. Esto no deja de ser al final que elegir entre Montesquieu y Maquiavelo y siempre Sánchez elige a Maquiavelo. Es un asalto al orden constitucional», aseveró.

Para la número dos del PP, con este paso se rompe la igualdad de los españoles ante la ley porque es «una reforma hecha a la carta» para aquellos que «no han rendido cuentas ante la justicia» o para que los que lo han hecho, se les pueda «aplicar un trato más beneficioso y corregir las penas», de forma que «se puedan volver a presentar ante las elecciones».

Esquerra celebró, como otros socios del Gobierno, la «supresión del delito» para «acabar con la represión política por el conflicto entre el Estado español y Cataluña». «Es un paso indispensable en la desjudicialización. Continuamos trabajando para poder votar un referendo», remarcó el presidente de la Generalitat, Pere Aragonès.

En el PNV, a la espera de conocer en profundidad el contenido de esta modificación del Código Penal, reconocen que «la música suena bien». En la formación vasca, creen que la reforma anunciada por Sánchez es «proporcional» aunque insisten en que no son partidarios de que exista el delito de sedición. «Si en lugar de haber aplicado el artículo 155 hubiéramos hecho un acuerdo, un pacto, por el cual las comunidades nacionales que existen en el Estado español tuvieran el derecho de poder decidir su futuro o de consultar a la ciudadanía qué es lo que quiere, probablemente, no tendríamos que estar hablando ahora de este tipo de cosas ni de delitos», señaló este viernes Andoni Ortuzar.

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