Vivan los novios

Si hay boda, hay sangre. Mucha. En 'La Casa del Dragón' hay tradiciones que no se pierden. En este episodio la mezcla de sexo y poder, de aspiraciones y deseos afectan de manera fatal a las distintas familias que aspiran a la herencia del cada vez más débil, enfermo y contradictorio rey Viserys. Mikel Labastida y Tamara Villena no se casan con nadie y rastrean las trayectorias narrativas y conspirativas de todos los contendientes y, en especial, el papel cada vez más activo y sibilino de la princesa Rhaenyra, cada vez más convencida de su futuro.

De dragones y pelucas

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De paso, Carlos G. Fernández se acerca al estilo y los ritmos del trabajo del autor original de todo esto, Georges R. Martin, cabalgando entre la escritura de sus libros y la producciones de las series derivadas. Y, bueno, echamos un vistazo en ese territorio, algunos personajes nuevos de esta entrega y su relación con el original de los libros.