Lo que nos unía

[Sonido ambiente mar]

Narrador Lo sabemos. Esta historia debería haber empezado en el mar. Y, tal vez, si lo hubiera hecho, no habría terminado en una sala de juicios , con una condena de decenas de años de cárcel...

Tal vez entonces los bufones de Pría no se habrían transformado en una galerna...

[Sonido galerna]

Narrador Galerna. Dice la Real Academia de la Lengua: viento súbito y borrascoso que, en la costa del norte de España, se levanta de manera imprevista causando daños en el litoral.

Una tempestad, pero con denominación de origen en el Cantábrico. Ahora, con la sentencia en la mano, sabemos que eso fue exactamente lo que desató Pedro Nieva el 16 de agosto de 2018.

Ainhoa Ardines No fue un arrebato, sino que se lo pensó durante meses y lo planificó.

Una tormenta de celos y odio que asoló Llanes y cuyos coletazos golpearon también a la localidad vizcaína de Amorebieta.

Portavoz… al acusado Pedro Luis Pedro Luis Nieva culpable de haber inducido a causar la muerte de…

Narrador La Justicia ha sentenciado que fue el electricista vasco quien ordenó el asesinato de su hasta entonces amigo Javier Ardines, concejal de IU y marido de la prima de su mujer. Aquel maremoto hundió la reputación del pequeño y coqueto municipio asturiano…

Vecino 1 La muerte de alguien no se la deseas a nadie.

Narrador …sumió a sus habitantes en una espiral de sospecha, aireó secretos y escándalos políticos y vecinales…

Vecino 2 Está claro que fue muy preparado, pienso yo [00:02:53][4.3]

Narrador …y sacó a la luz amores de verano que habían permanecido ocultos.

Vecino 3 el que mal empieza mal acaba toda la vida.

Narrador Por desgracia, también destrozó familias enteras.

Vecino 4 Lo siento mucho por la familia, la verdad.

Narrador Dicen las gentes del mar que no hay tormenta que dure 100 años. La tempestad Ardines se ha prolongado tres largos años. El tiempo que han tardado los tribunales en pronunciarse. Un jurado de cinco hombres y cuatro mujeres no tuvieron la mínima duda en encontrar culpables…

Portavoz jurado …por unanimidad a favor 9, en contra 0.

Narrador … al inductor, al intermediario y a los dos sicarios que ejecutaron a Javier Ardines.

Vecino 5 Que cumplan los años que tienen que cumplir.

Narrador Una resolución que cierra un capítulo funesto y triste para los vecinos de Llanes. El pueblo quiere pasar página. Necesita pasar página.

Miguel Rojo En Llanes, una vez conocida la sentencia, todo parece haber vuelto a la calma sobre el caso Ardines.

Narrador La condena supone un alivio, aunque para muchos de los protagonistas de esta historia la galerna sigue azotando en su interior. Y lo seguirá haciendo por mucho tiempo.

LAS DOS MUERTES DE JAVIER ARDINES. EPÍLOGO. LO QUE NOS UNÍA

[Sonido puerta de cárcel cerrándose]

Narrador 22 años de cárcel tendrá que cumplir Pedro Nieva. El electricista lleva 38 meses encerrado en el penal de Zaballa, en Álava, no muy lejos de los montes de Vitoria. Muestra buen comportamiento, dicen las autoridades. Allí es un preso tan introvertido como modélico. Apenas habla y sigue a pies juntillas las normas. Está en un módulo de respeto, es decir, más o menos protegido, y se mantiene ocupado: trabaja como electricista. Si continúa la buena conducta, tal vez podría obtener la libertad condicional en unos 12 años.

[Sonido rejas]

Narrador 22 años pasarán también entre rejas Djilali Benatia y Maamar Kelli. Los dos sicarios que proclamaron su inocencia entre lágrimas en el último día del juicio.

Djijali Te lo juro que yo no maté a vuestro familiar. Lo juro por mis hijos.

Narrador No les valió para mucho. Ahora, sus familias continúan viviendo en los barrios bilbaínos donde hacían sus negocios. En Otxarkoaga y Rekalde.

David Olabarri La sentencia ha caído como una losa y prefieren guardar silencio.

Narrador 20 años será el castigo de Jesús Muguruza, el intermediario, el que puso en contacto a unos con otros. Está interno en la prisión cántabra de El Dueso. No se sabe si allí ha recibido la visita del “tal Julian”...

Pedro Nieva Era amigo de Jesús Muguruza. Narrador … Aquel supuesto amigo que no apareció para avalar su coartada y en cuya existencia el jurado nunca creyó.

Jesús Muguruza Mi amigo Julián, de toda la o vida.

Narrador Su familia se ha mudado -qué paradoja- a Asturias. Al lugar del crimen...

[Sonido viento invernal]

Narrador Últimos días de enero de 2022. Fin de semana. Ha pasado poco más de un mes desde la sentencia. El día amanece frío pero luminoso en los bufones de Pría, en Llanes. El verde de las montañas se mezcla con el azul de un mar en calma. Hoy esos agujeros en la roca permanecen en silencio. No hay rastro de su característico rugido, ese relámpago que, cuando hay galerna, se escucha a cientos de metros de distancia, tierra adentro. Es una atípica mañana invernal. El sol del mediodía calienta la espalda de algunos turistas despistados que merodean por la zona, pese a que hoy no hay olas.

[Sonido turistas]

Josu García Soy un periodista del correo de Bilbao Estoy haciendo reportajes, no sé si ustedes saben que aquí murió cerca un concejal asesinado.

Turista 1 No tengo ni idea de que esto fuera un sitio funesto.

Narrador A la mayoría de ellos el nombre de Javier Ardines no les dice nada. Desconocen que a menos de tres kilómetros de donde se encuentran, el edil fue asesinado de forma brutal, en el verano de 2018.

Turista 2 Lo siento, puedo ayudarte.

Narrador Su fotografía salió en todos los telediarios, en todos los periódicos… Los bufones bramaron entonces con fuerza, reclamando portadas y llenando minutos de televisión. ¿Un crimen político? ¿Una venganza pasional? En cierta forma, ambas. Ya saben, como hemos visto, Javier Ardines murió dos veces. Hoy, ironías del destino, el concejal es un rumor lejano para los turistas que visitan Llanes.

Josu García No sé si saben que aquí cerca fue asesinado un concejal. Turistas 3 Ah, sí, sí, sí, Ardines, ¿no?

Narrador Un pueblo de postal, pero que sigue siendo escenario de luchas intestinas y tensiones urbanísticas.

[Sonido excavadoras, playa]

Narrador Porque la muerte del concejal de Izquierda Unida no ha servido para borrar la cara oculta de la Marbella del norte. La que su asesinato sacó a la luz. Los rencores e intereses especulativos continúan, aunque ahora soterrados, lejos del foco mediático.

A solo 800 metros de los bufones hay una señal de tráfico. La mandó colocar el propio Ardines. El edil prohibió el acceso a los vehículos de motor, en un intento de preservar la zona. El dueño de un restaurante cercano montó en cólera porque creía que iba a perder su clientela.

Faustino Hijo de puta, lo voy a matar.

Narrador Hoy, la señal tiene una pequeña acotación. En un rectángulo blanco se lee: “Excepto usuarios bar”. Es una señal convertida en símbolo, una metáfora de cómo un hombre solo, y hasta cierto punto incomprendido, un pescador con ideales que renunció a un sueldo de político, intentó cambiar las cosas. Para muchos, Ardines fue un ingenuo; para otros, un seductor compulsivo; para otros, simplemente una amenaza. Por eso la UCO se planteó la posibilidad del asesinato político. Una investigación que abrió heridas internas que aún supuran.

Porque la política en Llanes sigue siendo un cenagal.

Enrique Riestra es el alcalde, como en los últimos años. Llegó de la mano de cuatro partidos…

Enrique Riestra Javi era una persona muy honesta, un gran trabajador.

Narrador …pero ya no cuenta con el apoyo de IU. En abril la formación que lideraba Ardines abandonó el acuerdo. Incluso su sucesora, Priscila Alonso, dejó la formación de izquierdas. Desencantada.

Priscila Alonso Javi era lo que nos unía.

Narrador Teme que haya un pacto con el PSOE y vuelvan los socialistas al poder. Algo contra lo que el concejal seguro se habría rebelado, dicen en su entorno.

Josu García Decidí acercarme a Llanes para ver cómo estaban las cosas y lo que más me sorprendió es ver como el legado de Jardines se está diluyendo poco a poco. Le está pasando como a esa señal de acceso a los bufones de Pría.

Narrador Llanes está triste, pero aliviada. Anhela un verano en el que, al fin, vuelva la calma. Se acallen los ecos del asesinato y se acabe la pandemia para ver sus calles repletas de turistas…

Miguel Rojo Es como si todo lo que pasó se fuese olvidando poco a poco y las cosas volviesen a su lugar natural.

Narrador Llanes es el único pueblo que ha superado las pernoctaciones previas a la pandemia. Uno de los lugares preferidos para el turismo nacional. Parece que el asesinato se ha perdido en la memoria… Pero hay quien no olvida. La familia de Ardines guarda silencio por ahora. Al conocer la sentencia emitió un breve comunicado: “Se ha hecho justicia aunque ya nadie puede reparar el daño causado”. La viuda, Nuria, y sus hijos, Alba e Iván, intentan seguir con sus vidas, en mitad del naufragio, en mitad del silencio.

Ainhoa de las Heras Serán probablemente los únicos protagonistas de este caso que nunca podrán pasar página.

Narrador A 150 metros de su casa sigue estando la vivienda de veraneo de los Nieva. A veces, vacía. A veces, alquilada.

Ainhoa de las Heras Katia, somos periodistas del Correo.

Katia Blanco ¿Y que queréis? ¿Joderme más la vida?

Narrador La prima de Nuria, Katia, la esposa de Pedro, ya no aparece por Llanes. Vive en Amorebieta e intenta poner en marcha una tienda de golosinas. Culpa a la prensa de lo sucedido.

Ainhoa de las Heras Después del veredicto, su actitud cambió radicalmente. En vez de a su marido, culpa a los periodistas de haberle destrozado la vida.

Narrador Nadie se atreve a confirmar si finalmente Katia se ha divorciado de Pedro, como anunció ante el jurado. Hay quien piensa que solo era una estrategia procesal.

Y tampoco se sabe nada de A. otra de las amantes de Ardines que fue protagonista, a su pesar, en el juicio. Las defensas trataron de poner el foco en ella para sembrar dudas. No lo lograron. Y A. ha hecho todo lo posible para pasar desapercibida, incluso enviando a los medios de comunicación un requerimiento para que no se diga su nombre.

[Sonido bar]

Narrador: La sidrería Muros sigue abierta. Durante la pasada Navidad buscaban personal para la cocina y el comedor. Fue allí donde gran parte de esta historia quedó al descubierto, con el móvil de Nieva grabando a escondidas…

[Sonido grabación servilleta] Katia Blanco Le dije: “Pues sí, calentando la casa para cuando llegues” Menos mal que no sabe cómo la caliento.

Javier Ardines Calla, calla.

Katia Blanco No, no, no… Déjate.

Javier Ardines Llevamos años librando.

Narrador Allí se sirven cachopos de un kilo y la sidra brota de sus toneles. Nada ha cambiado.

[Sonido autopista]

Narrador A 200 kilómetros, en Bilbao, el barrio multicultural de San Francisco, donde Muguruza reclutó a Djilali y Maamar, sigue golpeado por la droga, la prostitución y el hampa.

[Sonido sirenas]

Narrador El puente Cantalojas marca la frontera entre el lustre del titanio del Guggenheim y el óxido de unas calles que las guías turísticas recomiendan no visitar. Otros personajes de esta historia que se movieron por la periferia del crimen prosiguen con sus vidas.

Detective Soy el detective 3100. Mi despacho es Arkos Detectives.

Narrador El misterioso detective que Pedro Nieva contrató para seguir los pasos de su excuñado no para de trabajar. Últimamente tiene muchos encargos para encontrar cámaras y micrófonos ocultos. También desenmascara bajas laborales fraudulentas. Rutinas.

David Olabarri Sigue con su trabajo y ahora se dedica más a temas empresariales, buscando micrófonos ocultos, grabaciones, este tipo de cosas.

Narrador Y tierra adentro, en el pequeño pueblo de Lastras de Teza, en Burgos, Sito, el hombre que susurraba a los jabalíes, no ha dejado de mimar a sus mascotas.

Sito Lucio A ver, chiquitina, guapa, guapa, chiquitina…

Narrador Es la mejor terapia para desconectar del negocio que tiene en Bizkaia. Sobre todo ahora que unas lluvias torrenciales inundaron su pabellón, causándole graves pérdidas. Los vecinos de Lastras de Teza han seguido muy de cerca el juicio contra Nieva. El inductor del asesinato de Ardines tiene aún una cuenta pendiente con la justicia por la aparición de una plantación de marihuana en el pueblo.

De vuelta a Llanes, en el puerto, todo sigue igual, trajines, viento, salitre, y el muelle corroído por el tiempo.

Miguel Rojo Ha vuelto a salir a la mar, pero con un patrón diferente.

Narrador La Bramadoria, el pesquero de Ardines, navega bajo el gobierno de otro marinero diferente.

[Sonido mar y bufones]

Narrador Hasta aquí. Una muerte. Una investigación. Unos asesinos. Una sentencia. Unas familias rotas. Y un pueblo que quiere olvidar. Dicen que los barcos tienen alma y es posible que la ‘Bramadoria’ eche de menos a Javier Ardines y sus largas jornadas de pesca en el Cantábrico. El tiempo está de su parte.