Ni una amenaza más, ni una muerte más

Narrador Ser político en un pueblo, en una villa, no es tarea fácil. Ya lo dice el viejo refrán: pueblo pequeño, infierno grande.

Y ser una mujer en el poder, mandar en un lugar donde todos se conocen, a veces desde niños, resulta, hoy todavía, complicado. Marta Alonso es alcaldesa de Ponga, un concejo situado al sureste de Asturias, en el límite con la provincia de León.

Marta Alonso Conlleva que tienes que en un momento dado demostrar más tu capacidad o tu valía a la hora de ostentar un cargo público.

Narrador Charo Fernández fue entre 2011 y 2019 alcaldesa de Ribadesella, donde se celebra cada año el famoso Descenso Internacional del río Sella.

Charo Fernández Ese papel de cuidadoras de nuestros mayores y de nuestros hijos, pues lo seguimos asumiendo con toda naturalidad. Estemos en el puesto en el que estemos.

Narrador Y Ana Díaz es alcaldesa de Riosa, en la montaña central asturiana.

Ana Díaz Parece que llevamos encima el estigma de ser mujer y de tener que demostrar mucho más.

Narrador Cuando Javier Ardines es asesinado, en el verano de 2018, rápidamente crecen las sospechas y los sospechosos. Se empiezan a desenterrar enfrentamientos pasados, no resueltos, y se sacan a la luz amenazas, hasta entonces, silenciadas. A la incertidumbre se le une el miedo.

Ana Vigón Salió mi marido primero de casa y al momento regresa diciéndonos que teníamos el coche completamente rayado.

Narrador A Ana Vigón, alcaldesa de Tapia, una de las mecas del surf en el norte de España, le rayan el coche.

Ana Vigón Te preguntas bueno, pues... ¿Quién pudo haber hecho algo así? Sobre todo el porqué.

Narrador A Ana Díaz, en Riosa, le llega una carta inquietante poco después de la muerte del concejal.

Ana Díaz Llevo dándole muchas vueltas a la frase y hoy me dicen que lo que le ha pasado a mi amigo Javier Ardines no es nada comparado con lo que me va a pasar a mí.

Narrador Le cuesta olvidar esas palabras…

Ana Díaz Llego a la conclusión que si alguien quiere hacerte más daño que matarte es haciendo daño a los tuyos. Entonces ahí es donde entra el miedo.

Narrador En pleno siglo XXI, estas alcaldesas se sienten señaladas. Pero ellas no son las únicas. Seguimos en Riosa.

Ana Díaz Ante el ataque recibido por el concejal José Manuel Pello, cuyo vehículo ha aparecido la mañana del pasado sábado rayado en sus cuatro costados.

Narrador En septiembre de 2018, solo un mes después de la muerte violenta de Javier Ardines, un concejal de Riosa es intimidado. Se trata de José Manuel Pello y es, como Ardines, de Izquierda Unida. Su coche aparece rayado y con la palabra DEP garabateada en el techo.

Ramón Argüelles Ni una amenaza más, ni una muerte más, de Izquierda Unida o de cualquier otro partido.

Narrador Es Ramón Argüelles, coordinador general de IU en Asturias. El partido se siente perseguido y reclama protección. Piden la intervención del Ministerio del Interior. Sí, del Ministerio.

Es un momento delicado, recuerda Gaspar Llamazares, diputado regional de la formación.

Gaspar Llamazares Al calor de un crimen todavía no aclarado, que se produzcan amenazas a cargos públicos es aún más inaceptable y requiere...

Narrador Todos estos incidentes salen a la luz mientras la investigación policial sobre el crimen de Ardines continúa. No hay, por el momento, detenciones. Sí existen, en cambio, muchas hipótesis y desconfianza.

Un crimen político es posible. Hay demasiados intereses afectados. Todas las vías de investigación están abiertas y las amenazas persisten.

LAS DOS MUERTES DE JAVIER ARDINES. EPISODIO 4: NI UNA AMENAZA MÁS, NI UNA MUERTE MÁS

Narrador Tan solo cuatro meses antes del asesinato de Javier Ardines, las paredes de Llanes amanecen cubiertas de pintadas. Juan Carlos Armas es concejal del Partido Popular en el pueblo.

Juan Carlos Armas Aparecieron unas pintadas que iban en contra del alcalde, del abogado consistorial y de algunos de los concejales.

Narrador Desde las paredes con pintura amarilla, al equipo de gobierno se le acusa de “terrotismo laboral”. Estamos en la primavera de 2018 y el cuatripartito (formado por PP, Foro Asturias, Vecinos por Llanes e Izquierda Unida) lleva tres años en el gobierno de Llanes.

Según ellos, no lo han tenido fácil. Según el PSOE, es decir, según la oposición, lo están haciendo muy mal...

Javier Ardines, representante de Izquierda Unida en la formación, ocupa las concejalías de Playas y Medio Rural, pero no solo esas.

Enrique Riestra Luego asumió Personal, que yo se lo pedí y él aceptó, cosa que siempre le agradeceré asumir Personal, que es una patata muy caliente.

Narrador Es algo más que una “patata caliente”, como dice Enrique Riestra, alcalde del concejo. Junto al urbanismo, Personal es una de las cuestiones más espinosas de Llanes en estos momentos. La clave de la acusación, la clave del “terrorismo laboral”.

Lucía Ramos Es que en Llanes, la tasa de interinidad es muy alta.

Narrador Lucía Ramos es periodista de ‘El Comercio’. Cubre la información del oriente asturiano.

Lucía Ramos Hay trabajadores interinos desde hace 25 años. Todos ellos contratados en la época del PSOE.

Narrador Eso, por supuesto, crea una situación de incertidumbre en el trabajador. Y de dependencia. María José Rodríguez Fernández, ‘Coté’, es secretaria general de la Asociación de Vecinos y Amigos de Llanes, Avall.

María José Rodríguez ‘Coté’ Gente que vive una vida laboral entera en situación de interinidad, lo cual es terriblemente arbitrario incluso para el propio trabajador, pero sobre todo también para quienes quedan en la calle sin ninguna posibilidad de acceso.

Narrador El PSOE se defiende. Para José Herrero, dirigente del partido socialista y aspirante a alcalde de Llanes en 2015, la alta tasa de interinos no es un mal endémico de Llanes ni algo buscado por los socialistas.

José Herrero La alta tasa de interinidad era algo habitual en todas las administraciones públicas de este país. De hecho, pues hoy, seis años después, se sigue con la política de bajar la tasa de interinidad.

Narrador: Pero Ardines no lo creía así, ni mucho menos. La periodista Lucía Ramos cubrió actos y entrevistas en las que Ardines habló claro sobre el asunto:

Lucía Ramos Él siempre era muy rotundo a la hora de hablar sobre la interinidad y sobre el personal. Muchas veces denunció la falta de transparencia que hubo en la contratación durante los gobiernos socialistas.

Narrador De hecho, en su última entrevista concedida al periódico ‘El Comercio’, en mayo de 2018, Javier Ardines puso este tema sobre la mesa.

Ardines Y además no es que lo diga yo o lo diga el alcalde, sino es que la propia Sindicatura de Cuentas, una auditoría que hizo en 2013, detectó que al menos 13 plazas de esas no tenían ninguna prueba selectiva. ¿Y tú por qué estás ahí, es la pregunta. O…¿Quién te puso ahí?"

Narrador Es decir, cargos a dedo, favores, enchufes. Denuncias que le enfrentaron incluso con los suyos, con los de su mismo partido.

Terry Basterra Tuvo bastantes enfrentamientos con el sindicato UGT, pese al ser de Izquierda Unida.

Narrador Terry Basterra es periodista de ‘El Correo’.

Terry Basterra Precisamente, por la decisión de de realizar una nueva relación de puestos de trabajo. Sacar alguna serie de plazas a concurso público que hasta que anteriormente habían estado ocupadas a dedo. O por lo menos no, no por concurso público. Y aquello le trajo muchas polémicas.

Narrador El periodista Miguel Rojo también lo corrobora. Enemigos fuera y dentro del partido.

Miguel Rojo Y cuando entró el nuevo gobierno cuatripartito empezaron a hacer limpieza, a intentar cambiar todo lo que había, ganándose muchas enemistades, creándose muchos rivales políticos dentro y fuera de su partido.

Narrador Ardines removió el asunto. El avispero. Ya no se trataba sólo de los contratos. Otra de las denuncias permanentes era la falta de control en jornadas y horarios. Ardines:

Ardines Seguramente a algunos que estaba saltando los horarios, que se estaban saltando el normal funcionamiento, hubo que recordar que a quien tienen que servir es a los vecinos, no a los partidos políticos que en un momento gobiernan tras las distintas elecciones.

Narrador “A quién y a qué servir”, recordaba en voz alta Javier Ardines. Lo dejaba claro. Era un servicio público. Pero esas preguntas, esa actitud suya tan reivindicativa no gustaba a muchos. Y son estos los que en Llanes empiezan a ver al concejal como un obstáculo para su forma de vida.

Manuel González Orviz Le generó muchos problemas y automáticamente se revolvían aquellos que entendían sus intereses afectados porque habían... era una especie de conciliábulo entre lo existente y lo que venía.

Narrador Es Manuel González Orviz, exsecretario general de Izquierda Unida de Asturias, quien anuncia lo que estaba por llegar. Cuando Ardines decreta sacar a concurso público las plazas ocupadas hasta entonces por interinos, esa revolución municipal desvela casos verdaderamente curiosos. Privilegios. Excentricidades. alcalde Riestra.

Enrique Riestra Si, por ejemplo, bueno, dos trabajadores como decías que sí, que fueron cesados y siguieron volviendo a trabajar y estuvieron nueve años con los derechos adquiridos. Pero claro, son trabajadores que estaban vinculado directamente al partido.

Narrador Se refiere al Partido socialista.

Enrique Riestra Nadie les pregunta Oye, ¿qué haces aquí? O nadie les preguntó Oye, ¿por qué te voy a pagar a ti la nómina? Esa es la realidad. Suena a chiste...

Narrador Un chiste que, sin embargo, es muy real y difícil de manejar porque más allá de papeles y números, están en juego el trabajo y el sustento de muchos. Familias enteras. Coté, la secretaria de Avall.

María José Rodríguez ‘Coté’ Y aquí no se trata de cargos políticos, sino de lo que dije antes modus vivendi, una manera de vivir, de llevar el pan a casa todos los días. Es muy difícil, muy desagradable, afrontar esta tarea. Y el único que se atrevió a hacerlo fue Javier Ardines.

Narrador Así, Ardines toma cartas en el asunto, en la patata caliente, pese a ser consciente de que todo ello puede crear problemas entre vecinos y amigos.

María José Rodríguez ‘Coté’ Y entonces, al tocar esta cuestión, pues eso suscitó muchísimos odios.

Narrador Odiar es una palabra poderosa, determinante y muy significativa. Lo impregna todo. Pero aquí tiene su uso, su hueco, con frecuencia. Y en el caso del personal municipal, más aún. Sobre todo, en lo concerniente a la Policía Local de Llanes, que se sitúa en el punto de mira de la regulación laboral. Hay que legalizar los puestos y hay que sacar las plazas, aunque eso provoque que algunos se queden sin trabajo. Aunque eso desate el odio.

Juan Antonio Galán Te marcan como enchufado, te marcan como afín al PSOE al final y que eres el el no sé, la putita del PSOE que hacer lo que lo que oyes. Eso es totalmente falso.

Narrador Juan Antonio Galán es expolicía local de Llanes. Él culpa al actual alcalde, a Enrique Riestra, de gran parte de lo sucedido con su puesto.

Juan Antonio Galán Pero el Riestra este tiene una fijación con los interinos. Se hizo una comisión de pa... pa... saber lo que estaba pasando en la Policía Local, porque funcionaba mal, sigue funcionando mal y funcionará mal hasta que se jubilen ciertas gentes...

Narrador José Herrero, desde el PSOE, está seguro de que Riestra también llegó al Ayuntamiento con una agenda “revisionista”.

José Herrero Fue efectivamente mirar continuamente hacia hacia atrás y revisar todo lo que habíamos hecho los distintos gobiernos socialistas.

Narrador Lo cierto es que seis de las 24 plazas convocadas por Javier Ardines son, precisamente, las de policías locales.

Los de entonces, los que llevaban más de 25 años en el puesto, pueden quedarse sin sus empleos. Entre ellos, Juan Antonio Galán.

Juan Antonio Galán Yo entré en el Ayuntamiento de Llanes en el año 92, en unas oposiciones de estas del verano.

Narrador Esa forma de evaluación se repitió hasta 1999.

Juan Antonio Galán Entonces, en el 99, en diciembre del 99, cuando ya teníamos un sargento catalán, Jordi, que dije 'Joder, le digo, todos los años nos tenemos examinar, a ver si hay manera de que no nos examinemos'. Y ya nos nombraron funcionarios interinos.

Narrador Así también entró Luis Garavito, otro policía local.

Luis Garavito Sí, sí, sí entramos a la misma vez.

Narrador Y esta manera de acceder, repetida y sin consecuencias, sin que nadie se preguntara si era correcta, legal, se convirtió en norma. Una costumbre.

Por eso, la decisión de Ardines de sacar las plazas a concurso público provoca que el escenario municipal se tense. Es un terremoto. Ardines no cede a las presiones y el ayuntamiento de Llanes se convierte, según Orviz, en un polvorín.

Manuel González Orviz Se le levantó gente cuando dijo que en el ayuntamiento no se entraba a dedo. Porque él hablaba así mientras no se entra a dedo, si no se entra por oposición o por concurso. Oposición generó... generó bastantes problemas.

Narrador Y tras su asesinato, estos problemas laborales se colocan en el punto de mira. Los policías interinos de Llanes se sienten señalados.

Juan Antonio Galán Un día sales de trabajar y suena el teléfono y... “¿qué pasó, mamá?” Y dice: “mira lo que está diciendo esta gente por la tele.” Le digo, “¿qué están diciendo? Que fuisteis vosotros ¿Que fuimos nosotros el qué? Los que matasteis a Ardines.

Narrador Galán, Garavito y sus compañeros interinos son llamados por la Guardia Civil. Se les toma declaración. Y en el pueblo, de nuevo, las especulaciones se disparan.

Juan Antonio Galán Se tomaron muestras de ADN, estaríamos allí... pues como aquí y ahora, respondiendo preguntas.

Narrador Hay que ir a declarar al cuartel…

Luis Garavito “Oye, tienes que venir mañana”. Sin problema.

Narrador Hacer análisis, pruebas…

Luis Garavito La muestra de ADN voluntaria. Toma, pum, lo que haga falta.

Narrador Después de la investigación, después de la declaración, Garavito recuerda que se sintieron acosados.

Luis Garavito Jolín, que tenemos familia. La gente habla en el cole o los críos. Oye...

Narrador Ocurre en el pueblo, en el bar, en la tienda de al lado, pero también en las redes...

Juan Antonio Galán Hay páginas y hay... Que yo no sabía ni que existían ni había entrado en ellas. Una de ellas era 'Cotilleando', se llama 'Cotilleando'. Pues abrieron un hilo, que yo no sabía lo que era abrir un hilo tan siquiera, abrieron un hilo del asesinato de Ardines. Nombres y apellidos, fotos nuestras, no sé qué...

Narrador Las investigaciones molestan, hieren, pero forman parte del proceso policial. A principios de otoño de 2018 todas las líneas de investigación están abiertas.

Lorenzo Silva Y bueno, dices, ¿podrá haber habido un asesinato político en España?

Narrador Esa era la pregunta que se estaba haciendo todo el mundo… También Lorenzo Silva, escritor que sabe cómo se mueve la lógica de la Guardia Civil.

Lorenzo Silva Hombre, en el ámbito local piensas en un asesinato político que no sea ideológico, sino que tiene más que ver con intereses dentro de la propia comunidad que el concejal puede haber alterado.

Narrador Cuesta creerlo pero no habría sido la primera vez que ocurre...

Lorenzo Silva No pienso, por ejemplo, en el alcalde de Polop, que luego que lo asesinaron...

Narrador Por eso hay que descartar sospechosos, motivos. Hay que llamar a declarar a todo aquel que tuviera algo que ver con el asunto. También, claro, a aquellos relacionados con las gestiones políticas que en ese último año habían perturbado de tal manera el pueblo. Para Coté, de Avall, la Guardia y los criminalistas actúan de manera razonable.

María José Rodríguez ‘Coté’ ...que es en primer lugar su entorno, su trabajo, los que se puedan derivar y las enemistades o amistades que todas estas cosas hayan podido generar.

Narrador Y justo ahora es cuando aquellas pintadas contra Ardines y el resto del Ayuntamiento cobran un sentido más desagradable. Acaso luctuoso. Hay que recordar que habían sido hechas solo cuatro meses antes de su asesinato.

Enrique Riestra No le dimos importancia…

Narrador El alcalde Riestra. Y Juan Carlos Armas, del PP.

Juan Carlos Armas No le quisimos dar…

Narrador Pintadas amenazadoras en las que les llamaban acosadores y les acusaban de “terrorismo laboral”. Ardines lo sabía, las conocía, y lo asumía. Era la diana. Él mismo lo explica en una rueda de prensa.

Ardines Si decir que ahora hay que trabajar en un horario normal, igual que todos tus compañeros eso es acoso laboral, pues entonces sí que reconozco que estoy acosando a los trabajadores.

Narrador “Si decir que hay que trabajar en un horario normal, es acoso laboral, entonces reconozco que estoy acosando a los trabajadores”.

Muchos frentes abiertos. Muchos intereses encontrados. Las polémicas por la protección de la costa y el acceso a las playas, el tema de los chiringuitos y los aparcamientos disuasorios, la guerra contra la especulación... Y ahora, además, la “patata caliente” de la gestión de personal…

Javier Ardines había estado en muchas trincheras y los agentes de la UCO, la Unidad Central Operativa, estaban investigando todas las posibilidades. Muchos, sin embargo, creían que esas sospechas políticas eran expresamente exageradas. Y que el asesinato de Ardines estaba siendo utilizado con fines partidistas.

Luis Garavito Se usó políticamente. Lo usó Riestra políticamente. Riestra y todos sus secuaces.

Narrador Eso es lo que dicen del alcalde, de los compañeros de Ardines, los expolicías Garavito y Galán.

Juan Antonio Galán Y el alcalde lo sabía, al día siguiente del hecho y toda la parafernalia de la sexta, del... del... de... del de la tele que se hartó de decir en la tele tonterías y subnormaladas porque era todo para sacar rendimiento político.

Narrador También José Herrero, quien apunta en la misma dirección: al alcalde. Él es el responsable de esa inquina.

José Herrero El alcalde fundamentalmente y las personas vinculadas a él dentro de la agrupación de Vecinos por Llanes, pues lo que intentaron fue llevar o intentar dirigir a la opinión pública hacia esa línea política o de los trabajadores para intentar justificar muchas cosas.

Narrador Lo que fue una batalla política, hoy sigue siendo una guerra.

Enrique Riestra Diría que es mentira y que lo demuestren.

Narrador Enrique Riestra, el alcalde, se defiende.

Enrique Riestra Que digan dónde y cuándo yo señalé alguien. Y no van a poder encontrarlo.

Narrador Entonces, en aquel verano del 2018, el clima de tensión es tal que tras el crimen regresan los viejos rencores y crece el desasosiego. Los roces políticos, las batallas de intereses se acentúan y trascienden al resto del pueblo. Las acusaciones cruzadas y las amenazas anónimas se producen entre aquellos que hasta tan solo unos días antes habían sido vecinos y amigos.

Odio que acorrala a familias y trae nuevos rumores de veranos lejanos. De vacaciones de hace más de 30 años. De amores adolescentes.

Hasta ahora, en la investigación, no se descarta ninguna hipótesis, pero, en un giro radical, la Guardia Civil analiza el teléfono móvil de Javier Ardines. En él… en él encuentra la pista definitiva.

Para eso habrá que pensar en las fiestas y en los bandos de Llanes. Otros bandos, otras elecciones que no son políticas...

Todas las historias tienen un olor o varios que las definen. Las que yo escribo, novelas y relatos, suelen oler a lluvia y a flores. No siempre, pero en muchos de mis textos hay alguna flor principal y otras secundarias que acompañan y guardan a los personajes y que varían su intensidad en función de los hechos que suceden a su alrededor. Vainilla, lavanda, dalias… Con la lluvia me sucede algo similar. Sea esta ligera o tormentosa, continua o pasajera, caiga en tímidas o en pesadas gotas, está presente en mis escritos como algo más que un testigo silente de los acontecimientos que narro. Con su presencia y su aroma genero sensaciones. Emociones también porque la lluvia huele a humedad, tierra mojada, viento aguoso y relente, pero también a soledad y misterio, a risas o miedo e incluso a llanto. Flores y lluvia. Eso es lo que esconden muchas veces mis palabras.

Y en esta historia que están escuchando y leyendo, si se fijan, también hay olores. Considerables, de hecho, y de muy diferentes tipos, pero dos son, a mi juicio, los aromas principales que la caracterizan. Les hablo del mar y el verano. En realidad, no solo la definen, sino que para mí han supuesto una gran ayuda a la hora de enfrentar esta experiencia como guionista, distinta al tipo de narración —bien periodística, cultural o literaria—, que acostumbro a firmar.

Sobre el aroma a verano, me temo que, en este punto del podcast, poco les puedo desvelar más allá de pedirles que no lo pierdan de vista, ya que tiene un peso importante en la ejecución de este guion, y que no tendrán que esperar demasiado para descubrir la importancia de un aroma tan particular; de un olor que, no obstante, estoy segura de que, si cierran los ojos, aunque yo no les pueda facilitar detalles, consiguen imaginar a la perfección. Seguro que saben cómo huele el verano y las miles de sensaciones distintas que provoca.

El otro olor básico de este documento sonoro es el del mar que, en realidad, funciona como eje vertebrador y ha guiado mi pluma en cada escena, hecho o situación que he narrado y/o descrito. Me ha ayudado —creo que, quizá, ha sostenido a todos los que hemos participado en la creación y producción de este podcast— a tener un anclaje de escritura para contar esta historia, la historia real de la muerte de Javier Ardines, y hacerlo sin caer ni en la afectación ni en el sensacionalismo porque no hay nada más sencillo, se lo aseguro, que pecar de ambos para conseguir una buena recepción. Es el camino más fácil. Siempre lo ha sido y no solo en este tipo de narraciones, sino en todas.

Decía apenas unas líneas más arriba que estoy acostumbrada a elaborar textos periodísticos de distintas clases y, por supuesto, textos literarios, siendo estos últimos con los que más trabajo, pues crear ficción, investigar para imaginar o solo imaginar para erigir historias forma parte de los quehaceres diarios de cualquier escritor. Por tal motivo, he de confesar que cuando entré a formar parte de este proyecto, sentí cierto vértigo. Me preocupaba que la realidad de lo sucedido con Javier Ardines no fuera suficiente para poder elaborar un esqueleto lo bastante sólido como para que sujetase la parte de la historia que me correspondía narrar. Hacerlo, además, al completo, con todas sus aristas —que, como están comprobando, son múltiples—, y que nada se perdiera por el camino. Todo es importante y todo hay que relatarlo sin dar nada por supuesto y sin adulterarlo. Las ‘trampas’ que a veces los escritores fabricamos no tenían aquí cabida. Por lo tanto, había que contar lo ocurrido usando las técnicas de una ficción, pero sin alterar ni uno solo de los hechos reales acontecidos porque la verdad debía estar por encima de cualquier adorno. Un verdadero reto.

Así las cosas, fueron profusas las ideas que pasaron por mi cabeza, unas locas y extravagantes, y otras lúcidas, que dieron forma a una parte de lo que hoy leen y escuchan. Si bien, entre todas las que volaron por mi mente, confieso que fueron las provocadas por los olores de los que les he hablado, verano y mar, las que me ayudaron. De ahí que este texto haya comenzado con la revelación de un secreto, que no es otro que la confesión de cuáles son algunos de los olores que uso a la hora de escribir. Y los aromas del podcast me sirvieron para trazar la verdad que queríamos contar, la que correspondía. De este modo, el vértigo que sentí cuando empecé, se esfumó y la pluma llenó páginas. Mar y verano que dotaron a las palabras del significado adecuado, del que debían tener para que nada quedara atrás. Para que en la muerte de Javier Ardines estuvieran reflejados todos sus grises, todos, y ustedes pudieran tener una visión completa de lo ocurrido antes y después del asesinato.