El precio disparado de los materiales asfixia a los talleres de Hogueras

Sin embargo, también ha servido para paliar el incremento de costes. Tanto la inflación como la guerra de Ucrania y otros factores han propiciado el encarecimiento del coste de la vida, un problema que ha entrado de lleno en el taller de los artesanos, por lo que también trasciende al sector de las Hogueras de Alicante.

Tanto los costes fijos de las empresas, como vienen a ser la electricidad, los combustibles, los seguros, alquileres, hipotecas, cotizaciones a la Seguridad Social, además de la subida de los materiales «hasta un 80%», matiza Gallego, ha provocado que la subida del baremo se ajuste, en parte, «al precio actual de las materias primas», incide también Javier Gómez Morollón, artista de Hernán Cortés.

La decisión tomada el pasado septiembre ha servido «para equilibrar los precios» y llevarlos «a la realidad real», comenta también el constructor de Polígono de San Blas, Paco Giner. En este sentido, respecto a 2022, una placa de corcho «valía diez euros y ahora tiene un coste de 18», manifiesta Gallego, además de otros productos que «han subido un 60% y un 70%», añade Morollón. Lo que consigue el nuevo baremo es «que se quede como estaba».

Los gastos fijos también se han hecho notar en este nuevo año. «El seguro de la nave subió bastante, también los costes laborales y los relacionados con lo esencial para la plantilla», expone Giner. Además, los impuestos «han subido también», lamenta Morollón.

Sin embargo, esto no acaba con la ilusión de los artistas, quienes «hemos intentado que la calidad siempre prime», desvela Gallego. Pese a la subida de la vida, «hemos intentado que todo esté muy pensado para hacer un producto muy original». Sobre todo para el único alicantino que planta en la categoría Especial, quien se siente «con mucha responsabilidad», además de «mucha tristeza», por lo que ha preparado una hoguera que muestre «que en Alicante hay presente y futuro artístico».

Porque de esto también se quejan otros artistas como Giner, quien incide en la falta de «mano de obra» en el sector, además de la ayuda institucional. Tras haber aumentado las subvenciones, en el caso del Ayuntamiento de Alicante, el artesano insiste en que «las comisiones deberían de tener más ayuda». «No estaría de más para una fiesta que mueve tanto».

Será el próximo año, en las Hogueras de 2024, cuando la nueva corporación municipal baraje (o no) una nueva subida de las subvenciones anuales a los distritos. Pero, por el momento, constructores como Paco Torres, quien se estrena en la categoría Especial este año, «intentamos hacer siempre el mejor trabajo posible, dentro del presupuesto», a pesar de que «desde hace unos meses atrás los materiales han tocado techo» y «todo continúa a un precio desorbitado, como la cesta de la compra».

Pese a esta situación, los constructores cuentan con «una ilusión importante» para sacar las hogueras a la calle. «Vamos a intentar hacerlo lo mejor posible» y, para ello, «pondremos lo mejor de nuestra parte».