
Las conexiones aéreas con las islas Baleares y Canarias están en serio riesgo. Así lo han avisado las aerolíneas, que alertan de que los «impagos» del Gobierno central en relación con los billetes subvencionados para los residentes insulares están «asfixiando» a las compañías, que se han visto obligadas a anticipar estas ayudas que cubren el 75% de los precios de los billetes.
Publicidad
Así lo denuncian desde la Asociación de Aerolíneas Aéreas (ALA), que explica que algunas de estas compañías que cubren vuelos entre las islas y la península «podrían verse obligadas a dejar de operar algunas de estas rutas o a reducir frecuencias ante la situación insostenible y de asfixia económica generada por el impago del Gobierno a enero de 2025 de 810 millones de euros».
Y es que la demanda en estas conexiones se ha disparado en un 9,6% respecto a 2023 en toda España. Una situación a la que no es ajena el aeropuerto de Alicante-Elche. En la terminal de El Altet son varias las aerolíneas que operan en rutas entre Baleares y Alicante y con Canarias. El tráfico con estas islas supone un 34% del total nacional registrado en el 2024, según datos de Aena.
La situación es preocupante, puesto que en el caso de Palma de Mallorca se trata de la segunda ruta nacional con más tráfico en la terminal alicantina, llegando a los 497.547 pasajeros en 2024 y aumentando un 8,5% respecto al anterior ejercicio. Ibiza, con 176.592 viajeros (un 26% más), y Tenerife, con 155.000 pasajeros (un 19,9% más), son la sexta y la séptima ruta del aeródromo. En el caso de Gran Canaria, se trata de la décima conexión nacional con más tráfico, con 57.460 en 2024 y un incremento de pasajeros del 39%.
En el caso de la ruta con Palma de Mallorca operan aerolíneas como Air Europa, Iberojet, Ryanair, Enter Air y Vueling, mientras que en la conexión con Ibiza operan Vueling, Ryanair, Iberojet y Air Nostrum. En cuanto a las Canarias, con Tenerife enlazan Ryanair, Vueling y Enter Air, mientras que Alicante y Gran Canaria están unidas a través de Vueling.
Publicidad
El retraso de los Presupuestos Generales del Estado (PGE) no ha hecho más que complicar la situación. El Gobierno asignó en los PGE de 2023 560,81 millones, una cantidad que desde ALA insisten en que «se ha visto ampliamente superada por una demanda por encima de los previsto». A esta cuantía se han sumado otros 170 millones a través del Fondo de Contingencia para financiar modificaciones de crédito, «pero igualmente se ha quedado corto», manifiestan.
Desde ALA han manifestado su preocupación por que la nueva prórroga dispare esta deuda hasta los 1.500 millones de euros. El presidente de la asociación, Javier Gándara, ha insistido en que esta asignación «está infradotada» y que se ha prorrogado desde 2023, resultando «del todo insuficiente para cubrir las subvenciones de hasta el 75% en las tarifas de los servicios aéreos».
Publicidad
Para Gándara, la situación «está comprometiendo la sostenibilidad financiera de estas aerolíneas hasta el punto de que, si esto sigue así, podría hacer inviable la operación de algunas de estas rutas, afectando gravemente a la conectividad de Canarias y Baleares». Es por ello que el presidente de ALA reclama al Gobierno que abone «cuanto antes la cuantía adeudada a las compañías que operan estas rutas».
Al mismo tiempo, Gándara expresa la necesidad de que se «corrija esta situación a futuro con partidas presupuestarias suficientemente dotadas y más realistas». Desde ALA prevén que se soporten más retrasos en un año en que la partida volverá a ser de 60,8 millones para cubrir las subvenciones a residentes este ejercicio, cuyo gasto se estima que alcance los 1.200 millones de euros, a lo que habría que sumar los 810 millones pendientes.
Publicidad
Las aerolíneas son meros intermediarios, se encargan de la ejecución del programa, actuando como entidades colaboradoras de la Administración de acuerdo a lo establecido en la normativa, aplicando el porcentaje de subvención legalmente fijado en el momento de la adquisición del billete subvencionado, y liquidando posteriormente ante la Administración, en este caso la Dirección General de Aviación Civil (DGAC), la cantidad restante, una vez el pasajero ha realizado el viaje objeto de la correspondiente bonificación.
La DGAC es la encargada por su parte de gestionar los créditos presupuestarios previstos para hacer frente a la subvención, y de abonar el importe de las subvenciones a las compañías aéreas. En resumen, las aerolíneas aplican la subvención en el billete del residente que, posteriormente, debe liquidar el Gobierno a través de la DGAC, con cargo a un crédito ampliable de los Presupuestos Generales y, en caso de superarse el importe consignado, puedes ser objeto de ampliación por parte del Ministerio de Hacienda.
Disfruta de acceso ilimitado y ventajas exclusivas
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión
Te puede interesar
Pillado en la A-1 drogado, con un arma y con más de 39.000 euros
El Norte de Castilla
Publicidad
Utilizamos “cookies” propias y de terceros para elaborar información estadística y mostrarle publicidad, contenidos y servicios personalizados a través del análisis de su navegación.
Si continúa navegando acepta su uso. ¿Permites el uso de tus datos privados de navegación en este sitio web?. Más información y cambio de configuración.