El Consell recurrirá los últimos recortes «ideológicos» al trasvase del Tajo-Segura

Los últimos desembalses aprobados por el Ejecutivo en los meses de verano no han llegado al máximo legal permitido de 20 hectómetros cúbicos, sino que el Ministerio los ha dejado en 15. Es decir, una «deuda hídrica» de 15 hectómetros cúbicos para los regantes de Alicante, en términos auspiciado por el presidente del Consell, Carlos Mazón. La consellera ha critica la «infamia hídrica a la que somos sometidos en esta tierra».

Pradas ha abierto este V Congreso Nacional del Agua que, bajo el lema de 'Seguridad Hídrica', se celebra en la localidad vegabajense de Cox. En el mismo foro, Pradas ha anunciado que el Consell pondrá en marcha las inversiones en infraestructuras hídricas que «estaban en un cajón» y ha asegurado a los regantes la prioridad de la Generalitat Valenciana en la defensa del trasvase Tajo-Segura.

En este sentido, Pradas ha destacado el compromiso del presidente de la Generalitat, Carlos Mazón, de que esta legislatura «sea la del agua», en la que el Consell defenderá los intereses de la Comunitat Valenciana «por todas las vías posibles».

La consellera ha defendido que el cambio climático «es innegable», por lo que «debemos ser capaces de afrontar estos cambios con una adaptación activa, ante una mayor escasez de agua, fenómenos más extremos y un aumento de la población que demanda una mayor cantidad de recursos».

Al respecto, Pradas ha explicado que «si hay que preocuparse por la gestión de la escasez del agua, también hay que hacerlo por su exceso». Al respecto, ha recordado los estragos causados por la DANA de septiembre de 2019.