Los nervios del mercado están a flor de piel. Así lo evidencia el comportamiento de los inversores durante una semana que el Ibex-35 despide con una caída acumulada del 1%. El saldo podría haber sido peor peor de no ser por el rebote del ... 1,15% experimentado el viernes, que devuelve al selectivo a los 9.147 puntos. Estos días ha llegado incluso a perder los 9.000 en los momentos de mayor tensión.
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No es para menos. Los operadores se han enfrentado a las reuniones de la Reserva Federal (Fed) en EE UU y del Banco Central Europeo (BCE), con sendas subidas de tipos de interés en otros 25 puntos básicos y muchas dudas en torno al futuro de la política monetaria.
Pero esas citas, que iban a ser claves para el devenir del mercado, se han visto eclipsadas por la crisis bancaria en EE UU, tras el rescate de First Republic Bank y con los inversores apuntando ya a dos nuevas víctimas de la pérdida de confianza en las entidades regionales del país.
La volatilidad está servida y las Bolsas se mueven al compás que marca Wall Street. Si el jueves pesaba el desplome sufrido por valores como PacWest o Western Allianz (las dos entidades señaladas como próximas 'caídas'), el viernes ambas entidades se disparaban en Bolsa, con subidas de más del 50% para la primera y de más del 40% para la segunda.
El sector se contagiaba del optimismo comprador y, en España, Santander recuperaba un 3%, Sabadell un 2,8% y BBVA un 1,7%, insufuciente no obstante para recuperar las fuertes caídas de las sesiones precedentes.
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CaixaBank, por su parte, cotizó con alzas del 1,39% la publicación de sus resultados, con un incremento del 21% en su beneficio del primer trimestre. IAG también rindió el viernes cuentas al mercado, con una notable reducción de pérdidas, hasta los 87 millones de euros. Sus títulos subieron un 2,44% al cierre.
Pese al rebote del viernes, es evidente que las dudas en torno a la salud del sistema bancario estadounidense seguirán marcando la evolución de las Bolsas en las próximas sesiones.
De momento, los expertos aconsejan a los inversores apoyarse en los resultados empresariales para definir sus opciones de compra. Así, una de las grandes alegrías de la semana la ha dado precisamente Apple, con una subida de casi el 5% en su cotización al cierre de los mercados europeos tras publicar sus resultados.
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El beneficio se quedó en 24.160 millones de dólares (21.871 millones de euros) en su segundo trimestre fiscal. Es un descenso del 3,4%. Pero ha superado las previsiones y, además, ha anunciado un plan de recompra de acciones de 90.000 millones de dólares (81.475 millones de euros).
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