La deuda pública marca nuevo récord y se sitúa en el 113% del PIB

Supone un crecimiento del 5,6% respecto al mismo periodo del año pasado, lo que significan 81.500 millones de euros más a sumar a la elevada deuda que acumulan las administraciones, debido sobre todo al aumento del endeudamiento del Estado como consecuencia de los menores ingresos y los mayores gastos derivados de la crisis de la pandemia primero y de las medidas anticrisis adoptadas por la guerra de Ucrania y el repunte de los precios después.

El Gobierno se ha comprometido con Bruselas a que la ratio de deuda pública (que cerró 2022 en el 113,2% del PIB) se reduzca este año hasta el 111,9%, unas previsiones medio punto más optimistas que las plasmadas en los Presupuestos Generales.

Es un nivel aún muy elevado respecto a lo que comenzará a exigir la Unión Europea, que restablecerá en 2024 las reglas fiscales que obligan a reducir el endeudamiento al 60% del PIB, así como el déficit al 3%. Al inicio de la pandemia estas reglas se suspendieron para dar margen a los países de la UE para dar ayudas a empresas y familias por las consecuencias económicas de la covid. El Gobierno planteó en su Programa de Estabilidad enviado a Bruselas que la deuda iría descendiendo hasta situarla en el 106,8% del PIB en 2026. Para 2024, el objetivo está fijado en el 109,1%, y para 2025 en el 107,9%.

De los 1,53 billones de euros, 1,36 billones corresponden al Estado, récord histórico para esta administración. Supone un incremento de 14.500 millones de euros en solo un mes y una subida del 7% en el último año.

Las comunidades autónomas, por su parte, también dispararon su endeudamiento en marzo hasta los 322.300 millones de euros, 4.700 millones más que en febrero (1,5%) y un 4% más que hace un año. Por parte de los ayuntamientos la deuda también subió hasta los 23.000 millones en marzo, un 2,7% más que el año pasado.

Y el endeudamiento de la Seguridad Social se mantuvo estable en tasas muy altas en marzo respecto a febrero, con 106.172 millones de euros, un 7% más que hace un año. Este repunte se debe, según explica el Banco de España, a los préstamos concedidos por el Estado a la Tesorería de la Seguridad Social para financiar su desequilibrio presupuestario y financiar las pensiones.