Los secretos de la masonería española en el exilio están en Alicante

Llegó un momento en España en que las logías que convivían en la nación llegaron a ser 248, sobre todo a finales del siglo XIX. Todas ellas estaban repartidas por las diferentes regiones de la nación. El secreto y las diferencias obligaron a que cada una de estas tuviera sus propios hermanamientos internos, hasta el punto de muchas de ellas ir desapareciendo.

Además, con la llegada de otras imposiciones religiosas, muchas de las logías tuvieron que partir hacia el exilio. Todas ellas con muchos de sus 'hermanos', mudando hacia otros territorios la sabiduría y materiales que estas les proporcionaban.

Ha sido este jueves cuando parte de estos fondos documentales han llegado a España. La Universidad de Alicante será, a partir de ahora, custodiadora de estos fondos documentales, que han sido donados por nuevas generaciones de las familias masónicas. En este caso, han sido los archivos masónicos del Gran Oriente Español en el exilio mexicano y en Francia de Manuel Perales.

Los restos de sus conocimientos llegaron de manos de su hija, María Perales, a la Sociedad Benéfica Constante Alona, que los ha donado de modo formal a la institución académica. El material donado está compuesto por cuatro cajas grandes que incluyen documentación masónica correspondiente al Gran Oriente español en el exilio mexicano y Francia desde 1947 a 1975, y documentos de las logias españolas en la etapa de la transición entre 1975 y 1982.

Estos se hallan en el Archivo de la Democracia de la UA, un departamento que realiza un «importante trabajo de investigación, conservación y divulgación», según ha expuesto la rectora Amparo Navarro. Gracias a «donaciones como este importante fondo documental», el archivo podrá estudiar y divulgar gran parte de los aspectos de «la masonería durante su exilio».

Asimismo, este espacio es «el lugar en el que debe estar este fondo documental para que tenga visibilidad, se pueda estudiar y ofrecer a la oportunidad a los investigadores de trabajar en él», ha señalado Rafael García Meseguer, representante de la Sociedad Benéfica Constante Alona. Con este gesto se inicia «una colaboración que esperamos sea muy provechosa» y ha avanzado que próximamente donarán «otros materiales».