Alicante, Murcia y Andalucía reclaman «justicia hídrica» para la cuenca del Segura

Serna ha afirmado que esta celebración ha puesto de manifiesto «la alianza entre la Diputación de Alicante, la Región de Murcia y Andalucía en defensa de esta infraestructura que es vital y fundamental para la supervivencia de este territorio»

El evento, celebrado en el Palacio San Esteban, ha contado con la participación del presidente de Murcia, Fernando López Miras; la consejera de Agricultura de Andalucía, Carmen Crespo; el presidente del Scrats, Lucas Jiménez; la vicepresidenta de la Diputación de Alicante, Ana Serna, además de agricultores y regantes del levante español.

López Miras ha remarcado su compromiso con el trasvase y ha incidido en que no descansará «hasta revertir el recorte para que el trasvase recupere su caudal».

El presidente murciano ha puesto de relieve que hace 44 años se producía un hecho «histórico» con el que la Región de Murcia hacía efectiva una demanda de muchas décadas atrás. Y ha valorado que gracias a «la llegada de ese recurso esencial, iniciamos un despegue imparable que nos ha convertido en lo que hoy somos», a la vez que ha incidido en que el agua y el trasvase también han contribuido al desarrollo de distintos municipios de la Región, la recuperación de espacios naturales y a frenar el avance de la desertificación porque «el agua es vida y ha permitido a la Región crecer como una tierra próspera y de futuro».

En su intervención ha arremetido contra el Gobierno de Sánchez y al que ha tildado de «sectarista» y sin «criterios técnicos», y ha reivindicado «que se haga justicia y se deje de atacar a la Región de Murcia y al Levante español». Y ha recordado que Murcia dio luz verde a la interposición de un recurso ante el Tribunal Supremo contra la decisión del Gobierno de España de recortar el trasvase, una medida que también adoptaron posteriormente Andalucía o la Diputación de Alicante.

Además, se ha referido a la iniciativa de impulso legislativo que se aprobó este miércoles en la Asamblea Regional para elevarla posteriormente ante el Congreso de los Diputados, con el objetivo de blindar esta infraestructura y que próximamente defenderá López Miras en la Cámara Baja.

El presidente de la Comunidad ha explicado que su Ejecutivo hará frente a esta decisión «con todos los instrumentos, contra las políticas sectarias y con una visión de Estado» y ha reiterado que es posible conectar las cuencas hidrológicas mientras se respeten las cuencas cedentes y los derechos de sus usuarios.

Para ello, ha subrayado una vez más la necesidad de alcanzar un Pacto Nacional del Agua, «un acuerdo nacional que cuente con todos, poniendo sobre la mesa la situación real y dejando a un lado la confrontación política con la que algunos pretenden tapar su falta de argumentos».

El acto se celebra un día después de que la portavoz del Gobierno, Isabel Rodríguez, mostrase «comprensión» hacia la Generalitat Valenciana y hacia su compañero de partido, Ximo Puig, por recurrir el trasvase Tajo-Segura que aprobó el Consejo de Ministros en enero. Rodríguez incidió en que el Consell puede hacer las «observaciones que crea conveniente en el marco legal de nuestro país para defender los intereses de su comunidad autónoma».

A juicio de la también ministra de Politíca Territorial, y bajo el dictado de Moncloa, el problema del agua es, sobre todo, «climático».