Más de 50.000 euros de multa a la empresa que dejó sin acabar las obras de San Blas de Alicante

Ante lo que la empresa alegó que el retraso no era imputable al contratista, sino que lo achacó a la falta de pagos, la falta de materias primas y de cumplimiento de los distintos subcontratistas.

Algo que no estimó así el director facultativo de las obras, quien a 1 de febrero emitió el informe definitivo en el que advierte de un retraso superior a la situación económica mundial y alega que los trabajos apenas alcanzaron una ejecución del 20% del total antes de su paralización en noviembre, cuando deberían haber estado al 80%.

Pero no solo eso, sino que en esas alegaciones la empresa se comprometía a retomar las obras después de Navidad y cumplir los plazos, algo que nunca llegó a ocurrir.

Por ello el Ayuntamiento de Alicante ha procedido a rescindir el contrato debido a «que el retraso existente a día de hoy es totalmente responsabilidad del contratista y que resulta perjudicial al interés público, considerándolo un incumplimiento contractual».

El expediente también recoge que «debido a dicho incumplimiento se están produciendo graves perjuicios transcurridos tres meses de absoluta paralización de obra», entre los que se encuentran la falta de seguridad ciudadana en el entorno, los problemas de transporte público y rodado, de movilidad peatonal, la falta de iluminación o la imposibilidad de mejora de los espacios públicos.

El portavoz adjunto del gobierno municipal, Manuel Villar, ha afirmado en la rueda de prensa de la Junta de Gobierno que «vamos a hacer aquellas actuaciones que permitan que la zona sea transitable, se van a poner los juegos infantiles o asfaltar calles. Pero el grueso de la obra no se puede hacer porque hay que volver a licitar».