Entra en vigor la Zona de Bajas Emisiones de Alicante: preguntas y respuestas

Alicante estrena el año 2025 y con él entra en funcionamiento uno de los proyectos más polémicos de los últimos tiempos en la ciudad: la temida Zona de Bajas Emisiones (ZBE). El pleno extraordinario de este lunes ha aprobado la ordenanza que regula este nuevo espacio en Alicante, que se ha activado en la ciudad con las campanadas de Nochevieja.

La realidad es que la ZBE afectará poco al día a día de los alicantinos. Y es que la ordenanza que regula este sistema para controlar la contaminación en la ciudad no prevé restricciones ni sanciones en Alicante. Una condición que ya anunció el alcalde Luis Barcala en campaña electoral y que le ha valido para que Vox sea su socio en la aprobación de esta normativa. El texto fue finalmente aprobado sobre la bandera, el 30 de diciembre, en un pleno extraordinario que ha recogido algunas de las propuestas pendientes de aprobación antes de acabar el año, como el incremento de la tasa de basura.

Aunque sin multas ni restricciones la ZBE de Alicante está llamada a mejorar el tráfico de la ciudad. Para ello, el proyecto cuenta con la instalación de más de 70 cámaras de lectura de matrículas y 15 medidores de la calidad del aire en la ciudad que permitirán conocer en tiempo real la información. Pero en un futuro la red podría llegar a albergar hasta 300 dispositivos.

Además, desde este 1 de enero la ciudadanía también podrá consultar la información en alguno de los diez paneles de mensajería variable instalados en los principales accesos de la ciudad coincidentes con viales limítrofes del anillo exterior. Este sistema servirá para trasladar la información precisa a los conductores del estado de calidad del aire, así como indicaciones del estado del tráfico de la ciudad. No es la única medida interesante, también se pondrá en marcha una aplicación que permitirá conocer en directo el estado del tráfico de la ciudad, la ocupación de los aparcamientos y otra información que facilitará a los conductores la toma de decisiones.

La ZBE divide la ciudad en tres anillos. El primero corresponde al Casco Antiguo de Alicante. Esta zona supone un espacio de más de 10 hectáreas de superficie situado entre la Rambla de Méndez Núñez, la avenida de Jaime II, la ladera del Castillo de Santa Bárbara y las calles Jorge Juan y Altamira.

El segundo anillo corresponde al Centro Tradicional de Alicante. El límite lo marcarán las grandes vías como Alfonso el Sabio, el paseo de Gadea y la avenida del Puerto.

Por último, el tercer anillo engloba todos los barrios en el interior de la Gran Vía. En su interior queda todo el centro, pero también algunas zonas como San Blas, Carolinas o el Pla.

El equipo de gobierno anunció que la ZBE no contaría con nuevas restricciones en la ciudad, un acuerdo que alcanzó con Vox para lograr la aprobación. Sin embargo, sí se mantendrán las que ya se aplican en el Casco Antiguo.

Así en el Anillo I el tráfico estará muy limitado según la ordenanza, tal y como ya ocurre ahora. Solo podrán acceder a esta zona las personas empadronadas, residentes, o propietarias de viviendas o garajes, independientemente de si poseen o no el distintivo ambiental de la DGT.

En cambio en los Anillos II (Centro Tradicional) y III (Gran Vía) la circulación será libre, sin restricciones ni sanciones. Todos los vehículos con etiqueta ambiental tienen acceso automático a estos anillos.

En el caso del Anillo I las multas continuarán como hasta ahora y podrían llegar hasta los 200 euros para aquellos que accedan al Casco Antiguo sin la autorización necesaria.

En el Anillo II (Centro Tradicional) y III (Gran Vía) las cosas seguirán como hasta ahora. La ordenanza no prevé ninguna sanción por acceder. Tampoco es necesaria ninguna autorización previa para acceder a las zonas interiores de estos dos.

Sin embargo, el proyecto de ZBE sí incluye restricciones temporales de acceso en zonas específicas y durante horarios determinados, en caso de que los niveles de contaminación superen los límites permitidos en alguno de los anillos de la ZBE de Alicante. Con esta medida se bucará evitar la congestión de tráfico en esta áreas.

En caso de ser necesarias estas medidas las restricciones se aplicarán de por fases, limitando el acceso de los vehículos más contaminantes durante episodios de contaminación atmosférica. Aunque no están previstas sanciones.

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