Cualquier pasillo del Mercado Central de Alicante de esta semana prenavideña es un gallinero. «¿A cuánto el kilo de cabrito?», «llévate este jamón que ha salido muy bueno», «estas gambas son para la plancha, déjamelas bien de precio», se escucha entre los puestos. Y es que un año más los alicantinos han elegido los mercados tradicionales para llenar la mesa en Navidad y Nochevieja. Unas celebraciones en las que lo tradicional marca la etiqueta y los menús pasan de abuelos a nietos sin grandes cambios de guión.
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Un año más sobre el mantel hay pocas novedades. «Vengo a por marisco para el 24 y cordero para la comida del 25», explica Agustina, una mujer de 70 años que apura las compras junto a su marido. También va a por lo clásico José, que espera en la cola de la charcutería su turno para comprar jamón y queso. Él y su hija, que le acompaña, han elaborado un menú en el que no falta el marisco, el embutido y un buen chuletón de buey.
Aunque, según afirman los clientes y confirman los comerciantes, los precios están más caros que otros años, nadie quiere quedarse sin una cena especial de Navidad, así que hacen el esfuerzo. «Está todo carísimo», afirma Dora, una mujer de 65 años que espera en la cola a la carne de la caldereta que cenará su familia el día de Nochebuena. Cynthia, de la carnicería El Carrascal, reconoce que en estas fiestas siempre sube algo el precio, pero insiste en que este año solo ha sido «uno o dos euros».
Los comerciantes tienen claros los trucos para evitar que el alza por las fiestas afecte al cliente habitual. «Mis clientas compran todo 15 días antes, yo se lo envaso al vacío, lo congelan y se evitan las colas y la subida de precios», destaca la comerciante. Explica que la subida, en su caso, es porque no hay tantos animales para la demanda y recomienda la previsión para «no quedarse sin lo que uno quiere cocinar para esta noche tan especial».
Este 2024 la campaña de Navidad ha sido particular para los comerciantes. Las fechas han hecho que abrieran el domingo 22 para evitar las aglomeraciones el 23 y el 24. «La gente no está mirando mucho los precios, las subidas típicas de estas fechas no han sido tan importantes y todos queremos lo mejor en nuestra mesa para estas fechas tan importantes», destaca el presidente de la Asociación de Mercados Municipales, Paco Alemany.
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La Navidad llega cargada de tradiciones, una de ellas acudir al puesto de confianza del mercado tradicional para comprar algo de salazón, jamón serrano, marisco o carne para una de las celebraciones más familiares del año. Una costumbre que los clientes afirman mantener también cuando se acaban las fiestas. «Compramos aquí por calidad, precio y por poder elegir», reconoce Agustina. «Tienes más producto y eliges el que quieres, no el que te dan envasado en grandes almacenes», reconoce Dora.
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