Alicante se abre a gravar más la tasa de basura a los pisos turísticos

José Vicente Pérez Pardo

Alicante

Martes, 24 de septiembre 2024, 14:38 | Actualizado 15:10h.

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La modificación de la tasa de basuras aprobada por el Ayuntamiento de Alicante, que llevará hasta a cuadruplicar el recibo, está abierta a negociación. Así lo ha dejado caer el portavoz del equipo de gobierno y concejal de Medio Ambiente, Manuel Villar, sobre las enmiendas que preparan los grupos políticos a la subida.

Este incremento de la tasa de basuras viene obligado por la Unión Europea para que el tratamiento de residuos no suponga un quebranto continuo a las arcas municipales. Los ayuntamientos, todos, deberán repercutir el coste real del servicio de basuras a los ciudadanos. Y esto provoca la anunciada subida a partir del 1 de enero de 2025.

Pero la modificación de la tasa está, en estos momentos, en trámite. Y aquí entra la negociación política. Los grupos de la oposición municipal se han mostrado en contra, cada uno con sus razones. Compromís, por ejemplo, considera que la mayor carga de la subida va hacia las viviendas en lugar de a los negocios, sobre todo bares y restaurantes, que son los que más residuos producen.

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Pero también las viviendas turísticas, la bestia negra de la oposición de izquierdas, cuya ordenanción el Ayuntamiento también quiere echar mano. Compromís propone que se graven más estos negocios, una opción que el Ayuntamiento no rechaza de plano: «Esperamos que planteen las enmiendas y, si los técnicos las consideran aceptables y el criterio político también, podríamos incluirlo», ha asegurado Villar.

El equipo de gobierno recuerda que la modificación de las tasas «tiene un gran trabajo detrás de los técnicos durante mucho tiempo» para calcular las repercusiones a los diferentes usos de los inmuebles. Y el criterio político que mantiene el Ayuntamiento «es el que viene expresado» en la modificación de la tasa de basuras aprobada la semana pasada por la Junta de Gobierno Local.

No obstante, también son conscientes de que les falta un voto para aprobar cualquier normativa en el pleno. Y lo tienen que buscar en los grupos municipales del pleno: una vez con Vox, como en la Zona de Bajas Emisiones (ZBE); otra con el propio Compromís, como la ordenanza de veladores, donde la formación nacionalista incluyó la reducción de horarios en las terrazas.

Para Compromís, el apoyo de iniciativas municipales les da un protagonismo que de otra manera no tendrían. Y le comen la tostada al PSOE como alternativa. Al Ayuntamiento le sirve para sacar adelante las iniciativas normativas, sobre todo cuando son obligadas como es el caso de la modficiación de la tasa de basursa.